Wenger, el técnico mejor situado

Un vaivén que ha desconcertado a jugadores y aficionados. Entre los teóricos que defendían la esencia del Madrid y los que apoyaban la mano dura se ha logrado alcanzar la confusión. Se ha mezclado tanto el agua con el vino que ahora es complicado discernir qué es qué.

La candidatura de Florentino Pérez se ha encargado de ir mostrando su proyecto, todavía no oficial, gota a gota. Ya se conocen los avances en las contrataciones de Kaká o de Ribery. Falta el entrenador. El guía. Arsene Wenger parece estar ubicado en la «pole», aunque hay algo más importante.

Definir la idea

¿Qué idea maneja y quiere el equipo de la dirección deportiva? ¿Hacia dónde quieren encaminar el proyecto; hacia otro Capello o hacia otro Schuster? ¿Qué espacio le dejarán al nuevo entrenador con una estructura tan encorsetada? Esa indefinición actual es la que debe resolver el nuevo presidente y la nueva dirección deportiva.

De las quinielas que se barajan en los medios de comunicación, Arsene Wenger reúne muchos de los requisitos para dirigir la nave blanca. Su idea de juego es la que clama el socio del Madrid desde hace mucho tiempo. En el Arsenal logró ligar un proyecto muy vistoso sin grandes figuras y con Cesc como referencia.

Es muy cuidadoso con los jóvenes valores y prueba de ello es que cada año debutan varios futbolistas con el primer equipo en la Liga inglesa. Además, agranda su perfil por su valía humana. Hombre discreto, cortés y muy educado dentro y fuera del campo.

También hay un pero. Es un entrenador que trabaja ajeno a lo que se dice o hace en los despachos. A él le gusta dirigir toda la estructura, desde los fichajes hasta la cantera, algo que choca frontalmente con la organización del Real Madrid, un modelo presidencialista, con su correa de distribución en la dirección deportiva.

Negociación en marcha

La negociación está en marcha. Pero no será sencillo porque el francés tiene contrato con el Arsenal hasta el 30 de junio de 2011 y quiere poner sus condiciones para no sentirse atado ante las decisiones que puedan tomarse en las capas altas del club.

Si falla, hay recambio. Aunque no muchos porque el perfil que quiere Florentino Pérez es férreo y muy definido. Siempre están los Ancelotti, Mourinho, Hiddink... Y la vía española: Míchel, Valverde, Juande...