Temor a un ajuste de cuentas entre hooligans ingleses en Madrid

La preocupación por esta coincidencia de los hinchas del Chelsea y del City aumenta porque aún permanecen en la retina las imágenes de la reyerta vivida en Sevilla hace apenas un mes entre seguidores del Eintracht alemán y el West Ham inglés, rivales de Betis y Sevilla en la Europa League. Ambas aficiones se cruzaron en el paseo de Colón y protagonizaron una espectacular pelea en la que volaron vasos y sillas. Tampoco se olvida que en la reciente visita de aficionados del Manchester United a Madrid con motivo del encuentro de octavos ante el Atlético, radicales rojiblancos buscaron un enfrentamiento con los ingleses en el centro de la ciudad. Por eso, la Policía también ha aumentado la vigilancia sobre los ultras del Atlético y del Real Madrid.

La UEFA llegó a plantear el cambio de orden en una de las dos eliminatorias para evitar esta concentración de aficionados ingleses, pero desde la Delegación del Gobierno dejaron ver que no había motivo para la preocupación y recordaron el buen resultado del operativo montado en la final de la Champions de 2019, cuando se recibió a cerca de 40.000 seguidores del Tottenham y el Liverpool sin que apenas se registrasen incidentes.

Con todo, la Comisión Antiviolencia ha declarado ambos partidos de alto riesgo y la capital se blindará hoy y mañana para evitar problemas con los hooligans. Habrá un seguimiento policial de las aficiones y presencia policial constante, además de acompañamiento de los hinchas hasta el estadio. Además, los dos equipos se han hospedado en hoteles lo más alejados posible a instancias de las autoridades. El Chelsea lo hace en el Eurostars, próximo al Bernabéu, mientras que el City dormirá en el Four Seasons, cercano a Sol.

Los dispositivos para los encuentros se establecieron de forma conjunta en sendas reuniones entre Ayuntamiento, Delegación del Gobierno y Jefatura Superior de Policía de Madrid. El primero afecta al partido del Bernabéu. Hasta ayer se tenía constancia de la llegada de 1.850 aficionados del Chelsea , lo que obligará a desplegar 300 agentes de la Policía Nacional y hasta 1.500 efectivos responsables de la seguridad. El operativo será mayor para el encuentro entre el Atlético y el City de mañana, para el que se espera la llegada de unos 3.600 aficionados ingleses, casi el doble que para el duelo del Bernabéu.

Una de las principales tareas será vigilar las zonas calientes donde se instalarán los ultras en las horas previas a los partidos. Se espera que un buen número de aficionados del Chelsea se concentren en torno a la zona de la Avenida de Brasil, poblada de bares y cercana al Bernabéu, pero de nuevo será la zona centro, alrededores de la Puerta del Sol, la más conflictiva. Las escenas de aficionados ingleses provocando altercados en la Plaza Mayor son recurrentes en cada visita de algún equipo inglés, imágenes que los vecinos llevan tiempo queriendo erradicar. «Cada vez es peor que la anterior. Pasas por un lugar emblemático, lo ves en ese estado y da mucha impotencia», explica a ABC Ricardo Bustos, presidente de la Asociación de Vecinos de la Plaza Mayor de Madrid (VPMMAD) . «Se ha generado un efecto llamada y a los ultras se suman los vendedores ambulantes, los lateros, los mendigos... Los hooligans empiezan a beber a las diez de la mañana y no paran hasta la noche. Se suben a las mesas, a los balcones, colocan sus banderas por todas partes. No es tanto una cuestión de seguridad, sino de imagen de la propia ciudad. No entendemos que se permita algo así en pleno centro de la capital».