Casillas, Xabi y Ramos quieren hablar

El equipo no habló en Villarreal porque no deseaba criticar a los árbitros. No hubo consenso en el seno del vestuario con la postura de Mourinho, que centraba sus críticas personales en Paradas Romero y prefería que todos sus hombres siguieran esa línea.

Xabi, Ramos y Casillas, precisamente, se negaban a centrar el 1-1 de El Madrigal en la actuación del juez de la contienda. Sabían que el rival y la prensa podían recordar también los dos penaltis cometidos por Arbeloa, en sendos agarrones, y no querían incidir por ello en este camino, porque al valorar las expulsiones de Mourinho, Faria, Ozil y Ramos, deberían juzgar igualmente la explosión de Pepe en el túnel de vestuarios, cuando insultó al colegiado, Paradas Romero. La plantilla ya quiso opinar el domingo , después de las goleada a la Real Sociedad , y definitivamente lo hará esta noche.