El Real Madrid se queda seco

Hace un año, al terminar la sexta jornada de la Liga BBVA, el Real Madrid había celebrado veinte goles. Casi tres veces más de lo que lleva esta temporada, plagada de contratiempos para los blancos desde que comenzó a finales del mes de agosto. La cifra puede sonar a obscena, pero no lo es tanto si analizamos el devenir blanco en el apartado ofensivo en los últimos años. Por ejemplo, en la temporada anterior había sumado 12 a estas alturas, y en 2009 acumulaba 17 . Números superiores en cualquier caso y que vienen a evidenciar un problema de acierto que ha llevado al equipo a ocupar una posición muy retrasada en la tabla, a ocho puntos del Barcelona.

Desde la temporada 2004/2005, el Real Madrid no sumaba tan pocos goles. En aquella ocasión, al terminar la sexta fecha del campeonato, los blancos apenas habían marcado cuatro tantos y ocupaban la décima posición , aunque curiosamente tenían dos puntos.

De esos siete goles, Higuaín ha sumado tres y Cristiano Ronaldo otros tres y uno ha sido de Benzema . El centro de campo, uno de los motores goleadores en la liga anterior, aún no se ha estrenado, y la defensa también aparece inédita.

Cuesta entender esta transformación del Real Madrid, un equipo acostumbrado a un altísimo porcentaje de acierto en sus acciones de ataque. La falta de adaptación de Modric o el bajo estado de forma de Ozil o Di María podrían ser alguna de las causas, aunque lo más preocupante es la falta de ocasiones que genera, muy lejos de las que conseguía antaño.