Inglaterra-Italia: una oportunidad para la historia

Rodó el balón y se despejaron las dudas. Inglaterra, más pragmática que nunca ante los problemas, pasó como primera de grupo y evitó a España. Los italianos sufrieron para pasar pero demostraron -gracias a que no hubo pacto entre España y Croacia- que suelen brillar cuando llegan a las fases finales con los fiscales a cuestas.

El partido de Kiev que decidirá el último semifinalista de la Eurocopa se antoja como otra batalla táctica por un billete para la final, aunque eso sea demasiado hablar. «Mientras estén España y Alemania será arrogante hablar del título» , sentenció Buffon. Prandelli estudia devolver a De Rossi a su posición natural para reforzar el centro del campo. Hodgson planteará un 4-4-2 tan típico como el té inglés con Rooney como estrella indisctubile de una Inglaterra sin complejos que pretende ganar por primera vez en su historia la Eurocopa

Steven Gerrard . Hodgson, ese hombre de mundo con el típico aspecto -pantalones por el ombligo y gafas de sol incluidas- de un guiri en Benidorm se arrimaba en Kiev al bueno de «Stevie G» , capitán de Inglaterra. A sus 32 años este centrocampista ídolo en Anfield encara una de las últimas oportunidades de su carrera. Lo hace con gran ambición tras dos temporadas casi en blanco por culpa de las lesiones. Su tremenda visión de juego y su capacidad para asociarse con Rooney se antojan como armas fundamentales del cuadro inglés.

Mario Balotelli . El niño de Italia que no quiere ser «Peter Pan» se muestra incapaz de huir de los titulares. Algunos creen que la camiseta «azzurra» le queda grande a este siciliano de ascendencia ghanesa que desafió antes del torneo a todo aquel que le insultase por su color de piel. Balotelli marcó a Irlanda tras decepcionar en los dos primeros partidos, pero su gesto técnico en el gol quedó tapado por una celebración presuntamente ofensiva fallida gracias a Bonucci. En los últimos días se ha dedicado a juegos de adolescente con el banderín y a gastar bromas a sus compañeros, con Cassano como última víctima. Prandelli podría dejarle en el banquillo, aunque «SuperMario» solo piensa en una cosa: «quiero ganar y quiero que pierdan mis compañeros del City».

Italia necesitó nueve partidos para derrotar a Inglaterra. Lo hizo por primera vez en 1973 gracias a Fabio Capello , seleccionador inglés hasta el pasado mes de febrero. De ahí que las estadísticas aseguren que nadie ha conseguido derrotar a la Inglaterra de Roy Hodgson. En total, Inglaterra e Italia se han enfrentado en 22 ocasiones a lo largo de la historia, con ligero dominio para los italianos, que han ganado nueve partidos y caído en siete. Pero la balanza cae todavía más del lado «azzurro» en los últimos treinta años: nueve partidos con solo una victoria inglesa. El último se disputó en Leeds en marzo de 2002 con triunfo italiano y Gianluigi Buffon como único superviviente.