Pellegrini mira a la cantera ante la plaga de lesiones que azota al equipo
Los encuentros después de una jornada de compromisos con la selección se han convertido en una trampa para la mayoría de los clubes. Los entrenadores viven en vilo las concentraciones y aguardan la llamada de rigor desde diversos puntos del mundo y así comprobar el obligado chequeo.
Últimamente Manuel Pellegrini sólo recibe disgustos. Desde accidentes domésticos a incidentes externos. El primer golpe duro le llegó desde Portugal el sábado por la noche. El tobillo de Cristiano Ronaldo no aguantó ni veinte minutos y dijo basta. Arriesgó en su deseo de llevar a Portugal hasta el Mundial de Suráfrica y lo único que consiguió fue agravar su situación, que se dispara hasta el mes de baja.
Sin embargo, en esta ocasión el peligro estaba en casa. El primero en caer fue Guti. No se entrenó la pasada semana por un golpe en el costado y después se lesionó en un tobillo. Él mismo se descartó para el partido de mañana en el Bernabéu contra el Valladolid y apurará para llegar a la cita de la «Champions» contra el Milan el próximo miércoles.
Se llena la enfermería
La enfermería blanca ha acogido más pacientes en las últimas horas. Metzelder se lesionó en una rodilla y Garay sufrió un golpe en la misma articulación en la sesión del miércoles. A esta plaga sólo sirve para sumar el trabajo de los médicos y de los fisioterapeutas a la vez que merma el número de efectivos con los que podría contar el entrenador en el siguiente partido de Liga.
A esta lista hay que añadir los casos ya sabidos de Arbeloa, Van Nistelrooy y Gago. Siete lesionados, aunque alguno puede ser recuperable. Tampoco se entrenó Dudek ayer. Ni Kaká. Ni Higuaín. El portero tenía permiso del club para volver hoy después de jugar con su selección. Tanto Kaká como Higuaín regresaron ayer de madrugada y sólo se entrenarán una vez antes del partido.
Si se mantiene este panorama, Manuel Pellegrini se verá obligado a rebuscar en la cantera para completar la convocatoria. Ahora mismo sólo dispone de 17 jugadores del primer equipo y el acta admite hasta 18. Aún dispone de veinticuatro horas para poder recuperar efectivos, siempre que no recaiga ninguno de los sanos.
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