Italia, el nuevo edén fiscal de Europa

«La Stampa» destacaba ayer que al central holandés se le garantizan unos altos ingresos « gracias al Decreto de Crecimiento aprobado por el Gobierno, que se asemeja a la exley Beckham en España para favorecer la contratación de campeones extranjeros». El diario turinés precisaba que el contrato de Mattthijs de Ligt establece «un salario de 12 millones (8 fijos más 4 de bonus) durante cinco años, y una cláusula de rescisión 150 millones de euros, mientras el Ajax percibirá 70 millones, y Raiola, el representante del jugador, se embolsará 11 millones de euros de comisión».

Con el objetivo de atraer a multimillonarios , el gobierno de Paolo Gentiloni aprobó en 2017 una oferta muy generosa: permitirles pagar un impuesto único anual de 100.000 euros sobre los ingresos derivados de inversiones inmobiliarias, dividendos o rentas de capital producidos en el extranjero y reconocidos como tales por el fisco (todo ello le supone a Cristiano Ronaldo unos ingresos, fuera del fútbol, superiores a los 40 millones de dólares). Si tienen mujer o hijos con rentas separadas, estos podrán gozar de las mismas ventajas fiscales, pagando 25.000 euros. Este tratamiento fiscal se les garantiza durante 15 años.

El caso de Ronaldo, que gana en la Juventus 30 millones de euros netos anuales por cuatro años, es ilustrativo . El astro portugués no solamente es una gran figura del fútbol, sino que con sus pies de oro ha montado un imperio económico que huye del fisco y encontró en la normativa italiana, una importante motivación, si no la principal, para fichar por la Vecchia Signora y establecerse en Turín. Cabe recordar la multa de 18,8 millones de euros que Ronaldo tuvo que pagar a la Hacienda española. Nada parecido le ocurrirá en Italia, donde su ahorro fiscal es importantísimo, entre salario, premios y patrocinios.

Al margen de esa normativa, el actual gobierno populista elaboró un proyecto, denominado «Decreto de crecimiento», aprobado por el Senado esta semana y convertido en ley, para atraer también inversores y nuevos residentes en Italia, viéndose claramente favorecido el fútbol italiano . La normativa establece que quien se transfiere a Italia, no habiendo tenido residencia en este país en los 2 últimos años, debe pagar impuestos solamente por el 50 por ciento de sus ingresos, por un periodo de cinco años, siempre y cuando permanezca al menos 24 meses en Italia.

En Italia se recuerda ahora que la normativa italiana se asemeja a la llamada «ley Beckham». Fue aprobada en el año 2005 por el gobierno de Zapatero y permitió a la Liga española fichar a grandes campeones como Kaká, Ibrahimovic y Cristiano. Se trató de una importante reducción fiscal del IRPF para atraer personal altamente cualificado al que durante 5 años se le concedía pagar un máximo del 24 por ciento sobre los ingresos en lugar del 43 por ciento, beneficiándose todas las categorías, incluidos futbolistas. El mismo gobierno Zapatero, para afrontar la crisis económica, excluyó de esos beneficios fiscales a los deportistas en el año 2010. Hasta entonces, la Liga española se vio claramente favorecida con relación a las tasas pagadas por los jugadores en otros países europeos: 50 por ciento en Inglaterra, 45 por ciento en la Bundesliga, 43 por ciento en la Serie A italiana y 40 por ciento en la liga francesa.

Ayer se conoció la decisión del TAS de excluir al Milán de la Europa League durante la temporada 2019-20 por su repetido incumplimiento del «fair play» financiero. Fue la propia entidad, que pertenece desde el verano de 2018 al fondo estadounidense Elliott, la que aceptó voluntariamente la sanción. Ayer informó de que las irregularidades fueron cometidas por la propiedad precedente, que pertenecía a un consorcio chino representado por Li YongHong.