José Juan: «No solo méritos, jugar en Primera depende de varios factores»

-¿Cómo fue su infancia futbolística?

-Jugaba en el equipo de mi barrio, en Vigo, y lo hacía de interior izquierda y de delantero, pero no debía ser muy bueno porque un entrenador me dijo que sería mejor que probara de portero. Y ahí empezó todo. No tuvo mal ojo ese entrenador.

-¿Por qué su padre no quería que jugara al fútbol?

-Él prefería que practicara el kárate. No le gustaba el fútbol. De hecho, los primeros años fue mi madre quien me llevaba a los entrenamientos. Ella murió de cáncer hace dos años. Ojalá pudiera haber vivido lo que sucedió el año pasado contra el Real Madrid.

-¿Cómo logra a su edad seguir en plena forma?

-Desde hace ya bastantes temporadas siempre he intentando perder un kilo por año. Si miras fotos mías de mi época en el Granada verás lo que he cambiado. Antes pesaba unos 86-87 kilos y ahora estoy en 79, pero aquí me quedo. Bajar más de peso ya es imposible. Perder un kilo cada año es muy complicado y requiere de mucho sacrificio, y a mi edad podría pasarme también factura estar más delgado de lo que ya estoy ahora.

-Alcoyano, Elche, Lugo, Granada, Águilas, Granada 74, Ciudad de Murcia, Ourense, Celta... Se ha recorrido media España con sus guantes.

-La verdad es que estoy muy orgulloso de mi carrera. En todos los sitios que he estado siempre he conseguido cosas bonitas. Con el Granada y el Elche logré subir a Segunda división, y con el Ciudad Murcia casi a Primera. En el Lugo me tocó la mejor época con Quique Setién en el banquillo. En el Alcoyano subimos a Segunda B y eliminamos al Real Madrid de la Copa. No me puedo quejar.

-Su debut en Primera fue el 11 de mayo de 2003 con el Celta, en un partido contra el Racing de Santander. Fue su primer y último partido en la máxima categoría.

-A lo mejor no he estado en el momento oportuno en el sitio adecuado. Como le he comentado, soy muy feliz con mi carrera, porque he jugado mucho en Segunda y Segunda B, pero es cierto que te queda la espina de no haber jugado en Primera uno, dos o tres años. Eso siempre me va a quedar ahí, claro.

-Sea sincero, ¿ha sido usted portero con nivel para Primera?

-Sí que he tenido nivel para jugar en Primera, pero no solo depende de los méritos propios. Hay otros muchos factores que influyen.

-José Juan no suena a un nombre muy futbolero. Puede parecer una idiotez y un argumento superficial, pero ya sabe usted cómo funciona esto del marketing. Quizás esto tampoco le ha ayudado.

-(Risas) No te diría que no. Suena mejor ‘José Juaninho’ que José Juan, pero no pierdo la cabeza por este asunto.

-¿Cómo ve desde la distancia la evolución del fútbol de élite?

-Es un negocio y se ve en los campos que cada día va menos público. La afición es la que tira de un equipo pero, salvo excepciones, en los campos hay muchas butacas vacías. El fútbol tiene que vivirse en directo y muchos hinchas ahora prefieren quedarse en su casa en la comodidad de su sofá y tele.

-En el Alcoyano usted sigue disfrutando del poco espacio romántico que aún queda en este deporte...

-Sí. Yo sigo viviendo lo poco que queda del fútbol auténtico. En El Collao, la afición aprieta y el ambiente es espectacular. El año pasado no se pudo comprobar, pero mañana habrá lleno, 4.700 espectadores, y lo veréis. Parece el típico campo inglés en el que la gente aprieta mucho. Me recuerda a mis inicios como futbolista.

-¿Sigue trabajando también como entrenador de porteros en el Club Costa City de Saúl Ñíguez?

-No. Ahora estoy en el Intangco y en la Granja de Rocamora. Me gustaría seguir ligado al fútbol como entrenador de porteros y poder enseñar todo lo que a mí me han enseñado.

-¿Se gana dinero siendo un profesional de Segunda y Segunda B?

-Se puede vivir, y ya está. No se vive holgadamente.

-El año pasado fue el portero que más paradas le hizo al Madrid, diez. ¿Qué no se vio de aquella heroicidad?

-Courtois vino al vestuario y me felicitó por mi actuación. Me pareció un gesto muy grande por su parte porque después de caer ante un equipo de Segunda B no era una situación fácil. Además, antes me había dado su camiseta. Este año he pedido la de Benzema.

-En Wikipedia le pusieron José Juan, presidente de España.

-(Risas) No sé quién lo hizo, como cualquiera lo puede cambiar... La gente por la calle me dice que hay que eliminar otra vez al Madrid. Tenemos ilusión, pero dos veces consecutivas es muy complicado.