Comienza la guerra por la incalculable herencia de Maradona

A lo largo de sus 60 años de vida, Maradona amasó un patrimonio plagado de propiedades, joyas y coches de alta gama , de los que era un enamorado. Tenía, además, diferentes contratos publicitarios en activo y continuaba trabajando como entrenador, lo que le reportaba buenos ingresos de manera regular. De hecho, aunque es complicado, se estima que su herencia podría rondar los 80 millones de euros .

Morla, su abogado y una de las personas más cercanas a Diego en sus últimos días de vida, deberá hacer ahora el reparto que nunca quiso hace el futbolista, que a lo largo de su vida tuvo varias relaciones de las que nacieron ocho hijos, aunque el astro solo reconoció a cinco de ellos. En primer lugar, Dalma y Giannina, las hijas que tuvo con Claudia Villafañe , su relación más estable.

En 2013 tuvo a Diego Fernando con Verónica Ojeda , tras lo que decidió asumir la paternidad de dos vástagos más nacidos hace tiempo. Jana (30 años), fruto de una relación con la italiana Valeria Sabalain y Diego Júnior, hijo de la también italiana Cristiana Sinagra . De sus relaciones en Cuba, donde se le señalan hasta tres hijos más , el «Diez» nunca quiso saber nada, al menos de puertas para fuera.

También habrá que tener en cuenta para la herencia a Rocío Oliva, su última novia , a la que vetaron la entrada en el velatorio por no considerarla de la familia. Habrá que ver cómo se sucede la lucha por el reparto de los bienes, pues la rubia argentina fue el último amor de Maradona antes de morir.

Resulta imposible conocer el listado completo de propiedades que atesoraba el exfutbolista ya que a lo largo de su carrera fue acaparando inmuebles a lo largo de todo el mundo. Los más importantes en Argentina son el apartamento de Segurola y La Habana, en Villa Devoto (uno de los mejores barrios de Buenos Aires); otro apartamento más en ese barrio; una casa en Nordelta que cedió a sus hermanas; un apartamento en Puerto Madero , una de las zonas más exclusivas de la capital argentina; y una casa en Bella Vista , donde vive actualmente Rocío Oliva junto a su familia. Fuera del país, Maradona tenía algunas inversiones inmobiliarias en Italia, donde no podía entrar por sus problemas con la justicia.

Los coches, una de sus grandes pasiones, también acapararon buena parte de sus inversiones. Entre las decenas de autos que poseía, los más caros son un Rolls Royce Ghost (300.000 euros) y un BMW i8 de alrededor de 150.000 euros . Algunos de esos vehículos los tiene repartidos por el mundo, en países como Dubái o Bielorrusia, donde vivió en algunas épocas de su vida.

Los regalos recibidos a lo largo de su carrera también forman parte de este legado por el que lucharán sus exmujeres e hijos. Por ejemplo, un tanque anfibio del ejército de Bielorrusia o un anillo valorado en 300.000 euros. Además, en las cuentas bancarias de Maradona quedarían varios millones en líquido, fruto de los contratos publicitarios que mantenía con algunas firmas como Puma o Konami . También tenía inversiones hoteleras en Cuba y diferentes negocios repartidos entre China e Italia.

Por último, todos los trofeos y recuerdos que el astro mantenía de su época como jugador cobran ahora una importancia especial, pues su valor se ha disparado. Con ellos podrá crearse en el futuro un museo en recuerdo al futbolista que sería una máquina de hacer dinero.

Será la Justicia la encargada de valorar todo el patrimonio dejado por el «Diez» antes de que Morla pueda proceder al reparto, que será complicado y que, seguramente, provocará nuevos litigios y peleas entre sus herederos.