Benzema se viste de Van Basten en Pamplona

En Pamplona, la jugada la inició Cristiano Ronaldo por el costado izquierdo. Se quitó de encima a los rivales a golpe de bicicletas y puso un balón en largo al área, al segundo palo. Allí esperaba Karim Benzema, que no se lo pensó dos veces para empalmar la pelota con una espectacular volea que entró por la escuadra opuesta.

La factura fue muy parecida a la del tanto de Van Basten que sentenció la final de la Eurocopa de 1988. «Wouters se hizo cargo del esférico y progresó en larga carrera para ceder en corto a Muhren, quien en galopada de extremo zurdo centró alto y pasado para que el balón fuera empalmado por Van Basten de volea. Un gol maravilloso, su quinto gol en la Eurocopa. Ya se sabe que no hay quinto malo», apuntilló en la crónica del encuentro para ABC Carlos Briblán .

Con la camiseta del Real Madrid también dejó una volea para la historia Zinedine Zidane. Llegó en la final de la Champions League de la temporada 2001-2002, cuando el genial futbolista francés conectó una estética volea en la escuadra de la portería del Bayer Leverkusen. Aquella noche, en Glasgow, el Real Madrid levantó su novena Copa de Europa.