Las notas de la Liga que termina

Fue el año de un nuevo descenso de un equipo que recurrió a Javier Clemente cuando se asomaba al abismo de manera irremediable, el Sporting , y de otro, el Villarreal que hace poco asombraba al mundo con los altos vuelos de su fútbol y que ve como ahora el destino lo condena a un destino más acorde con su gen de modesto, las catacumbas de la segunda división.

Fue la liga de los 50 goles de Messi , del retorno de Simeone al Manzanares, esta vez revestido del aura de entrenador milagro, y del adiós de Unai Emery al banquillo del Valencia. Fue la liga de muchas cosas. Pero sobre todo, fue la Liga en que cayó el imperio del Barça de Guardiola y el Madrid recuperó su posición natural en la historia, en lo más alto. Ahora toca hacer balance a unos y otros. Nosotros les ponemos nota

-Real Madrid (1º) : Los blancos conquistaron con autoridad su trigésimo segunda liga y volvieron a plantarse en las semis de la Champions, donde solo la falta de acierto en los penaltis de un partido memorable les dejó fuera. Una temporada con un título en Chamartín no debería ser excepcional, pero esta es diferente porque prevalece la sensación de que se ha quebrado la prolongada hegemonía culé. El Madrid no nació para ser segundo y han sido tres largos años ocupando esa dolorosa posición. El Real recuperó la corona doméstica con desahogo y gracias a un Cristiano inapelable. Rota la inercia histórica, ahora le toca prolongar su reinado y extenderlo al que ha sido siempre su medio predilecto: Europa.

-Levante (6º) : Lo del Levante es un auténtico milagro. Con uno de los presupuestos más bajos de Primera división, el bloque dirigido por Juan Ignacio Martínez ha logrado a base de compromiso el pasaporte a la Europa League . Sorprendentes al comienzo, el plantel granota, formado con veteranos y descartes de otros modestos, ha mantenido un rendimiento excelente hasta la última jornada. El fútbol del Levante no engaña. Solidarios y concentrados en defensa, sacándole el máximo partido a sus armas, el aguerrido Levante se ganó el premio..

-Athletic Club (10º): La llegada del argentino Marcelo Bielsa ha sido un verdadero revulsivo para este histórico del fútbol español. Ignorando la tradición de fútbol directo y bravío de San Mamés , Bielsa ha transformado completamente al equipo, implantando un juego de toque y combinación que ha permitido el lucimiento de promesas como Iker Muniain y Ander Herrera . El resultado, dos finales, algo que solo los más viejos recordaban en Bilbao. La primera terminó en fiasco, pero todavía queda la posibilidad de llevarse la Copa del Rey ante un Barça crepuscular. En Liga, acomodados en tierra de nadie, hacía tiempo que los leones se dejaban llevar.

-Valencia (3º) : Emery se despide con la satisfacción del trabajo bien hecho, pero también con la amargura de la falta de cariño de una afición exigente hasta el extremo. A pesar de que la situación económica le ha venido privando un verano tras otro de sus estrellas y de que las lesiones le han dejado sin jugadores como Éver Banega y Sergio Canales , llamados a tener un papel protagonista en el equipo, el vasco ha conseguido colocar a los ches por tercera vez consecutiva en el tercer puesto de la Liga, el primero entre los equipos de esta galaxia. Además, el Valencia se plantó en semifinales de la Copa del Rey y de la Europa League. Le quiera o no la afición, Emery le sacó petróleo al grupo en la temporada de su adiós.

-Málaga (4º) : Ha sido a golpe de talonario, pero no todos los proyectos con dinero obtienen resultados tan inmediatos como el Málaga de Pellegrini . Los millones del jeque catarí Al-Thani poblaron La Rosaleda de futbolistas reputados y, con Cazorla como abanderado, el «ingeniero» dio con la tecla tras un inicio dubitativo. Al final, el Málaga alcanzó un éxito sin precedentes en la historia de la entidad y acorde con la cuantía de la inversión del magnate (75 millones de euros en fichajes). Si no la pifia en la ronda previa de la Champions , el Málaga estará en disposición de dar un salto cualitativo y elevar aun más su techo el año que viene.

-Atlético (5º): Las cosas empezaron torcidas en el Manzanares. Nadie, salvo la directiva, y quizá tampoco ella, creía en Gregorio Manzano y, pese a boyantes incorporaciones como la de Falcao o Diego, el equipo tuvo un mal arranque. La sustitución de Manzano por Simeone devolvió el alma al equipo y la fe a la afición, iniciándose una remontada que, de no ser por la pifia en el descuento ante la Real, habría concluido con el regreso del Atlético a la Champions. La conquista de la Europa League fue le justo premio a un equipo que supo reinventarse y que tendrá que hacerlo de nuevo este verano si, como parece, no consigue retener a sus principales figuras. -Betis (13º): El regreso a primera del Betis se cerró con buen sabor de boca. No solo porque el equipo no ha tenido problemas para consolidarse en la máxima categoría, sino también por cómo lo ha hecho. Pepe Mel ha seguido creyendo en su apuesta por el fútbol de toque y su audacia, junto a un grupo de jugadores de notable calidad, ha regalado momentos de buen juego a la afición. Los 16 goles de Rubén Castro, que se ha salido, certifican la querencia por el ataque de los verdiblancos y, quizá le coloquen en la agenda de Del Bosque.

-Barcelona (2º): El final de la era Guardiola se les está haciendo largo a los barcelonistas. Despedido entre unánime admiración el entrenador que moldeó un equipo inolvidable, en Can Barça esperan que la conquista de la Copa del Rey sirva al menos para no cerrar la temporada en blanco. Pero el ambiente que exuda el vestuario no parece el de las mejores épocas. Superado con claridad en la Liga, secado por el Chelsea en Champions, con Alves perdiendo los papeles en el césped y Pep mostrando su hastío sin disimulo en el banquillo y en la sala de prensa, el partido contra el Athletic se ha convertido en la última oportunidad para no cerrar con mal sabor de boca la era de Guardiola y no envenenar la herencia que recibirá Tito Vilanova. Si gana la final, aprobado, si no, suspenso. -Osasuna (7º): Los rojillos, con José Luis Mendilibar al frente, se quedaron a las puertas de la Europa League tras una temporada que solo cabe calificar como muy meritoria. Las cábalas no cuadraron en el último momento y Osasunase quedaron a las puertas de un éxito que les habría hecho justicia.

-Mallorca (8º) Joaquín Caparrós llegó demasiado tarde. Sus números al frente del cuadro bermellón son espectaculares, pero el lastre de los puntos perdidos en el primer tramo de la temporada fue al final insuperable. El, preparador andaluz llegó en medio de la crisis institucional abierta por la abrupta salida de Laudrup y consiguió que el vestuario se centrara en la competición. Al final le faltaron partidos y le sobró cruzarse con un Real Madrid hambriento de récords. Caparrós negocia ya su continuidad con el club.

-Getafe (11º): Los azulones se dejaron ir gran parte de la temporada. Con la permanencia asegurada, el resto del curso fue de clama chicha. No ha alcanzado el Geta el esplendor de sus años de glorias europeas y ahora espera que su adquisición por un grupo de inversores dubaití mejore las perspectivas del equipo. El año del retorno de Güiza no fue triunfal, tan solo discreto.

-Real Sociedad (12º): La Real fue sinónimo de irregularidad, pero alcanzó sin agobios su objetivo de mantenerse en primera. No es poco, teniendo en cuenta los apuros de la pasada temporada. Con el francés Montanier al frente, los donostiarras han alternado algún momento brillante con una tónica general anodina. Con la previsible salida de algunos de sus jugadores más determinantes este curso, la Real tendrá que confiarse el año pasado a los jóvenes a los que ha podido dar minutos al no peligrar la salvación, son los Illarra, Iñigo Martínez o Pardo. Sin embargo, la grada no parece haberle cogido demasiado cariño al preparador francés, por lo que su continuidad no es segura.

-Rayo Vallecano: (15º): A los de Vallecas les van las emociones fuertes. Solo así se explica que después de completar dos tercios del campeonato a gran nivel se metieran ellos solitos en un jardín que, de no remediarlo Tamudo en el descuento, habría acabado en final trágico. De haber bajado, un club con tantos acreedores como el Rayo lo habría tenido muy difícil para sobrevivir. Probablemente, los de Sandoval salvaron en su épico encuentro ante el Granada mucho más que la categoría. Pese a su bajonazo final y la crisis abierta en el vestuario, hay poco que reprocharle a los rayistas. -Granada (17º):Con muchos apuros, pero al final el equipo rojiblanco mantuvo su plaza en Primera División. Gracias a favores ajenos, porque perdió ante el Rayo. En la temporada de su regreso a la élite, el cuadro andaluz confió a partir de la décima jornada en Abel Resino, que le devolvió al equipo el empuje del que había carecido con su antecesor en el banquillo. Sostenido en puntales como Diego Mainz o Martins, el Granada pasó casi toda la segunda vuelta a salvo del descenso. Sin embargo, ha sido una carambola final lo que lo ha salvado. El objetivo de consolidarse en primera, cumplido.

-Sevilla (9º): Por primera vez tras ocho temporadas, el Sevilla se quedó fuera de Europa. Acostumbrado a codearse con la élite, el sevillismo vivió con inquietud la destitución de Marcelino y la llegada de Michel para intentar enderezar el rumbo no bastaron para alcanzar los objetivos. Los buenos resultados iniciales del técnico fueron flor de un día y el equipo volvió a la mediocridad en la que ha sido la tónica dominante. El sevillismo termina la 2011-2012 entre la melancolía por el adiós del ya legendario Kanouté y las dudas sobre si Míchel tendrá la oportunidad de pilotar el proyecto del año que vienen desde el inicio.

-Español (14º): La grada de Cornellá cerró la Liga con una pañolada que certifica el suspenso a los periquitos este curso. Aunque Pochettino quiera consolarse con que los abucheos de la parroquia iban más encaminados al palco que al césped. Los blanquiazules no se han esmerado en adecentar su estadística ni siquiera en el tramo final de la temporada y la cierran con la única noticia de la desafección de su hinchada.

-Zaragoza (16º): Terminó bien, pero el desenlace pudo ser otro perfectamente. Salvado a última hora, el Zaragoza se entregó a Manolo Jiménez en circunstancias críticas. El buen hacer del técnico andaluz obró el milagro y enjugó, sudando sangre hasta el último día, los cinco puntos que separaban a los maños de la salvación. En el club deberán tomar nota para evitar nuevas apreturas el año que viene. Todo apunta a que les encantará contar para ella con Jiménez.

-Villarreal (18º): La gran decepción del año, sin duda. Diseñado para grandes gestas, el «submarino» sucumbió víctima de sus propios errores e innegables dosis de fatalidad. A la lesión de su goleador, el italiano Giuseppe Rossi, se ha sumado el flojo rendimiento del brasileño Nilmar, y sobre todo, los caprichos de un destino que con dos goles en dos estadios diferentes en apenas cinco minutos lo condenaron a un hoyo del que se creía a salvo. Con todo, mal harían en Villarreal si se obsesionan con su mal fario y olvidan que tres entrenadores diferentes, Garrido, Molina y Lotina fueron incapaces de hacer funcionar a su equipo.

-Sporting (19º): En El Molinón han aprendido una lección que ya conocían en otros lares, que contratar a Javier Clemente en una situación desesperada no te asegura la salvación, sino todo lo contrario. La destitución de Manolo Preciado, un técnico estrechamente vinculado al club, no sirvió para enderezar el rumbo y al final el desenlace fue el que Clemente había experimentado ya en otras tres ocasiones con tres equipos diferentes: a segunda.

-Racing (20º): Si la llegada de un millonario árabe sirvió para catapultar al Málaga, en Santander han vivido la experiencia contraria. El indio Alí Shyed dejó a su paso por El Sardinero un boquete económico y una tragedia deportiva, la del descenso. Álvaro Cervera no logró salvar desde el banquillo a una nave a la deriva que vuelve a segunda en medio de una gran incertidumbre en lo institucional once años después de su último descenso .