Alex Ferguson, caso de estudio en Harvard

Elberse, que anteriormente ha diseccionado los secretos de otros fenómenos como LeBron James, Lady Gaga, Tom Cruise o Maria Sharapova decidió llevar al técnico del Manchester United a su clase de «marketing estratégico en economía creativa» . «No existe un entrenador activo en el mundo del deporte con su trayectoria, con el número de títulos y trofeos que ha acumulado», explica la profesora en declaraciones difundidas por la Universidad.

La profesora viajó junto al coautor del estudio, Tom Dye, dos veces a Inglaterra para ver en acción al técnico del Manchester United. Primero en marzo, en plena temporada, y luego julio para hablar con más calma con todo el equipo. «El acceso que nos dieron fue notable. Pudimos ver cómo plantea los partidos, tanto en la ciudad deportiva como en Old Trafford. Nos guió personalmente por las instalaciones del club , con acceso a partes del estadio normalmente vetadas a los visitantes. Tuvimos la oportunidad de hablar con un rango de personas que trabajan con él y le valoran, desde el director general del equipo a sus ayudantes, jugadores, canteranos e, incluso, las mujeres que se encargar de la lavandería. Todas las experiencias fueron de un valor incalculable para comprender el día a día de Sir Alex», cuenta Elberse.

Lejos del fútbol, el estudio de Elberse se centra en la gestión que ha encumbrado a Ferguson como uno de los mejores entrenadores de la historia, imborrable su huella en el Manchester United. La publicación destaca la capacidad de gestionar y motivar a «algunos de los más grandes atletas del mundo» sin perder de vista las últimas novedades en tecnología y pautas de entrenamiento, además de planear la estrategia tanto en el campo como en los despachos. «Sir Alex subraya la diferencia entre construir un equipo y construir un club» , cuenta Elberse, que detalla el empeño de Ferguson de revolucionar el club nada más llegar con un programa de formación para jóvenes, senda similar que acaba de tomar el Manchester City 25 años más tarde.

Ferguson abre sus secretos a la hora de gestionar el vestuario. «Debo dejar descansar a jugadores para un partido de importancia menor. Existe un riesgo en hacer eso, que puede ir contra ti, pero has de asumirlo. Tienes que confiar en tu plantilla», revela el técnico del United durante una de las conversaciones con Elberse. « Los jugadores hoy en día viven mucho más protegidos , así que son mucho más frágiles de lo que eran hace 25 años», confiesa Ferguson, cuya carrera en los banquillos arrancó en el East Stirlingshire escocés en el que ganaba 40 libras a la semana al frente de un equipo que ni siquiera contaba con un portero fijo.

«Antes era muy agresivo. Soy un apasionado y quiero ganar siempre. Ahora soy algo más suave , cuestión de la edad, pero puedo manejar mejor a esos jugadores frágiles», revela el técnico, que se forjó durante años fama de tipo duro en el vestuario. «No hay lugar para la crítica en el campo de entrenamiento. Para un jugador no existe nada mejor que escuchar “bien hecho”, son las dos mejores palabras inventadas jamás en la historia del deporte. No se necesitan superlativos», añade. Nada de minar la confianza de los jugadores. « No puedes estar siempre gritando, no funciona . Nadie quiere que le critiquen, pero en el vestuario es necesario que señales los errores de los jugadores. Yo lo hago después de cada partido, sin esperar el lunes, y paso al siguiente partido. De nada sirve criticar a un futbolista constantemente», sentencia.

El técnico, eso sí, deja claro que la autoridad dentro de un equipo debe ser siempre la del entrenador. « No puedes perder jamás el control, no cuando estás tratando con 30 futbolistas de primer nivel que son millonarios . Se les multa si son indisciplinados, pero lo mantenemos de puertas para dentro. Y si alguien se escapa de mi control está muerto», sentencia Ferguson. Ni una concesión siquiera a las estrellas. «Les explico que el trabajo duro también es una forma de talento, que necesitan trabajar más duro que el resto. Y si no pueden adaptarse a la disciplina que exigimos en el United están fuera».

Además de prestarse al estudio, Ferguson quiso estar presente en el aula el día que Elberse expuso a sus alumnos sus conclusiones. «Tuve que tener en cuenta que se abría una posibilidad para hacer algo que no había hecho antes. A estas alturas de mi vida, sentía que si estaba ayudando al progreso jóvenes a través de mi experiencia en la gestión, sería un factor importante para mí», confiesa el técnico del United.

Con el aula repleta, varios estudiantes ataviados con la camiseta del equipo inglés, Ferguson respondió a una enorme batería de preguntas. Desde su impresión sobre el entrenador del Real Madrid a Guardiola. « Mourinho es muy inteligente, tiene mucho carisma . Sus jugadores juegan para él y es un hombre atractivo», bromeó el técnico. «Guardiola es un tipo impresionante. Ha conseguido cambiar el Barcelona, instando al equipo a trabajar siempre muy duro para recuperar el balón segundos después de perderlo», alabó. «Fue un día increíble» , recuerda la profesora. «Parecía muy a gusto y disfrutamos muchísimo con la experiencia. Todos querían hablar con él después de clase y accedió a reunirse con un grupo de ellos de una manera informal por la tarde», explica agradecida Elberse.

La experiencia, cuenta el periódico de Harvard, también fue beneficiosa para Ferguson. «La parte de la charla en la que más aprendí sobre mí mismo fue cuando discutieron entre el balance entre “miedo” y “amor” en mi enfoque de la gestión de las personas. Si echas un vistazo a mi historial, hay mucha exageración sobre broncas, ira y demás, pero los estudiantes reconocieron el otro lado, mucho más coherente sobre mi manera de relacionarme con los demás y de desarrollar el equipo a lo largo de los años. La realidad no es siempre como cuenta la prensa. Siento que los estudiantes fueron muy precisos a la hora de analizar este aspecto, preguntando y reconociendo esta importante dinámica de la gestión», sentencia el técnico del United, profesor por un día.