La Liga más reñida de Europa

Consumadas ya siete jornadas, una quinta parte del torneo, solo hay cuatro puntos de diferencia entre el primer y el séptimo clasificado, una situación que no sucedía desde la temporada 2006-2007 , cuando a estas mismas alturas el Valencia y el Barcelona encabezaban la clasificación con los 16 puntos que ahora también tiene el Villarreal, sorprendente líder del actual campeonato . «No siento nada especial por estar donde estamos ahora. Es una anécdota nuestra posición», detalla Marcelino, el entrenador del conjunto castellonense, pero a pesar de su humilde reflexión la realidad es que todas las grandes Ligas de Europa, la única que comprime tanto sus puestos de cabeza es la española.

De hecho, en la Ligue 1, el PSG ya vuelve a ejercer con puño de hierro, como viene ocurriendo en las últimas tres temporadas en las que ha conquistado su torneo con enorme superioridad. Hoja de ruta que también se repite en la Bundesliga, donde ya hay siete puntos de distancia entre el Bayern y el Borussia Dortmund , primer y segundo clasificado de la Liga alemana. Y no es solo la amplia diferencia numérica, sino las sensaciones Solo hay que echar la vista atrás 48 horas y repasar la paliza del conjunto de Guardiola a su principal enemigo: un contundente 5-1 en el Allianz Arena y gracias.

Mientras, en la Premier League, solo el descalabro del Chelsea en estos dos primeros meses de competición le da algo de salsa a un campeonato en el que City, Arsenal y United ya comandan con suficiencia, como se vaticinaba desde el mes de agosto. Solo la Serie A, gracias al extraño e irregular inicio de temporada de la Roma y de la Juventus, parece abrir el abanico a otros posibles candidatos, pero la poca fiabilidad de Fiorentina, Lazio e Inter genera serias dudas de si serán capaces de aguantar la pelea por el Scudetto durante todo el curso.

En cambio, en España la rutina ha desaparecido. Desde la mencionada temporada 2006-07, el líder de la Liga no sumaba tan pocos puntos (16) tras siete jornadas . Ese campeonato lo ganó el Real Madrid de Capello con 76 puntos (y gracias al goal-average particular) la cifra más baja de los últimos diez años. Desde entonces ningún campeón ha bajado de los 80 puntos. Incluso hasta en dos ocasiones el ganador de la Liga lo hizo sumando la mayúscula cifra de 100: el Real Madrid de Mourinho en la campaña 2011-2012 y el Barça del malogrado Vilanova en la temporada 2012-2013.

El dato podría dar cabida a pensar que hay un bajón en el nivel de los equipos, pero es todo lo contrario. La competitividad de los «outsiders» ha crecido bastante en comparación a temporadas pasadas. A las ya complicadas plazas del Calderón, San Mamés, Anoeta, Mestalla o el Sánchez Pizjuán, se han unido la de Balaídos y El Madrigal . No es casualidad que en algunos de estos campos ya hayan naufragado Barcelona , Real Madrid y Atlético.

Cierto es que ninguno de los tres grandes favoritos está en su mejor versión, pero también lo es que en anteriores campañas, con una función a medio gas, salían ganadores en la mayoría de estos estadios. Eso ya parece impensable en la actual Liga, donde el Celta es capaz de endosarle un 4-1 al vigente campeón , o que una ciudad de poco más de 50.000 habitantes es capaz de liderar el campeonato durante tres semanas consecutivas.