Munir sustituye al lesionado Diego Costa

Los orígenes marroquíes del delantero le obligan a decidir con qué combinado nacional quiere disputar los encuentros internacionales. La federación del país magrebí, consciente del talento de Munir, tenía la intención de convencerle, pero él mismo mantuvo la incógnita: «No he decidido todavía, aunque aquí estoy bien». Ahora la velocidad de vértigo que ha tomado su carrera le ha obligado a mojarse. Así, si Del Bosque echa mano de él en el partido contra Macedonia ya no habrá marcha atrás. Tendrá que jugar siempre con España, con el incoveniente que ello supone dada la tremenda competencia que existe en la Roja en comparación con la selección marroquí.

De su talento, trabajo y fortuna depende que su caso no se parezca, por ejemplo, al de Bojan Krkic, que escogió España cuando tenía la opción de jugar con Serbia. Mientras, Rafinha, a diferencia de su hermano Thiago, optó por vestirse con la camiseta de Brasil. Munir está de moda y su condición de hispanomarroquí, en lo que a selección se refiere, acelera un proceso ya de por sí relámpago gracias a su magnífica pinta. Que se lo pregunten a Luis Enrique, que se lo ha quedado en el primer equipo del Barça en detrimento de Deulofeu y lo ha alineado de titular en las dos jornadas de Liga que se han disputado hasta el momento.