«Seny, pit i collons» en Villarreal

Es imposible que jugadores como Messi o Cesc, que fueron sus niños en un Cadete B en 2002, consigan aislarse de una noticia tan triste. Cuesta creer que Sergio Busquets y Pedro, que han compartido como futbolistas el mismo recorrido de Tito Vilanova como técnico desde el filial en 2007 hasta 2013, tengan fuerzas para ponerse las botas. Pero hay una Liga en juego, el Barça todavía opta a ella. Y todos saben que el mejor homenaje al amigo fallecido es disputarla hasta el final.

El Tata Martino, el relevo urgente de Tito Vilanova en verano cuando el técnico catalán tuvo que renunciar a su cargo, tiene que levantar el ánimo de un equipo que pelea ya a la desesperada contra la amenaza de esa temporada sin títulos que ahora sí marcaría un final de ciclo. El Villarreal no lo pondrá fácil. Quiere certificar su clasificación matemática para la Europa League.

El técnico argentino, que no ofreció rueda de prensa en señal de duelo por la muerte de Tito, cuenta con varias bajas por lesión como Valdés, Piqué, Puyol, Alba, Neymar y Jonathan dos Santos. Sí recupera a Sergio Busquets tras su sanción y duda entre devolver la titularidad a Cesc Fàbregas lejos del ruido del Camp Nou, donde la afición ya ha señalado al de Arenys como uno de los culpables, o mantenerle en el banquillo.

Marcelino García Toral, quien ha recordado lo bien que le acogió Tito Vilanova cuando, estando sin equipo, acudió a estudiar los entrenamientos del Barça de Pep Guardiola, convocó a 20 jugadores. Tiene dos bajas: Dorado y Pablo Iñíguez. «Lo del fin de ciclo no me lo creo, el Barça es un equipazo y ganar es un sueño para nosotros con el premio añadido de la clasificación para Europa, sería muy bonito y lo vamos a intentar», comentó el técnico.