La defensa y la portería, en economía de subsistencia

Hace meses ya se criticó duramente en el entorno azulgrana que Zubizarreta y Martino decidieran que Neymar fuera la única cara nueva con vistas al curso que está en marcha. Tras la salida de Tito Vilanova , directiva y cuerpo técnico prefirieron no tocar nada y tirar con lo puesto; el ex técnico quería incorporar un central de garantías, pero finalmente se apostó, más por fe que por convencimiento, por la recuperación de un Carles Puyol que ha terminado claudicando por su calvario con la rodilla. Por otra parte, se pospuso el fichaje de un portero titular hasta la salida definitiva de Valdés.

Las consecuencias de estas medidas conservadoras ya se están notando esta temporada, puesto que Pinto disputará el tramo decisivo de inicio por la traumática lesión del titular habitual y Bartra y Mascherano quedarán como única opción para el centro de la defensa por los constantes problemas de Puyol y la inoportuna fisura de cadera que Piqué sufrió este martes ante el Atlético de Madrid. Por lo tanto, si el problema ya duele hoy, peor aún sería si la FIFA se mantiene firme y, como pretende, prohíbe los fichajes en Can Barça hasta 2015. Y es que el club, consciente de las necesidades del equipo, tiene en mente realizar varios fichajes y repescar a Rafinha y Deulofeu, que están cedidos.

En todo caso, se espera que el Barcelona mande un comunicado, apure la vía legal y recurra la sanción, lo cual podría aplazar todo el proceso. En ese caso, el club sí que podría fichar este verano. Sin embargo, si finalmente no puede acudir al mercado, el Barça ni siquiera estaría en disposición de incorporar a Ter Stegen o Halilovic, dos jugadores con los que ya está de acuerdo. Los cedidos, en cambio, sí que podrían volver; caso de los citados Rafinha y Deulofeu o también de Bojan Krkic. Por otra parte, podría cambiar la situación de jóvenes del filial como los centrales Ié, Bagnack y Sergi Gómez, el centrocampista Sergi Samper o el portero Jordi Masip.