MUNDIAL 2014
México, con un pie en Brasil
El «Tri» derrota 5-1 a una floja Nueva Zelanda en el partido de ida de la repesca

Por primera vez en esta fase previa de la Copa del Mundo , México hizo valer su superioridad ante un rival que sólo opuso pundonor. El 5-1 final deja al «Tri» con un pie en Brasil, a falta de un interminable viaje a Nueva Zelanda y de otros 90 minutos que, salvo hecatombe, deberían ser de trámite. Pero lo más difícil queda por hacer: encontrar un entrenador, un once titular y, sobre todo, un estilo de juego. Hasta junio hay tiempo.
El «Tri» llegaba a esta repesca casi de milagro, gracias a un gol de Estados Unidos en Panamá, cumplido ya el tiempo reglamentario, que dejaba fuera a los centroamericanos. Para solventar este doble compromiso ante la campeona de Oceanía, la Federación recurrió a su cuarto seleccionador en cinco partidos: Miguel Herrera . El técnico del América optó por armar un bloque con los hombres a los que entrena semana tras semana, más algunos futbolistas que también disputan el torneo nacional, y dejar fuera a los jugadores “europeos”. Sin Chicharito, Giovani, Guardado, Aquino y Moreno, pero con Rafa Márquez de nuevo como «gran capitán».
México salió sin prisas y sin demasiadas ideas ante un rival que le esperaba muy ordenadito en su campo, con nueve hombres para arropar a su portero, confiando en que un pelotazo largo para Wood (desgarbado y torpón: un Julio Salinas que no sabe jugar al mus) o una jugada a balón parado pudieran dar la sorpresa en el Azteca. Los locales parecían atenazados por el inusual frío con que amaneció el Distrito Federal , para desesperación de los vendedores de cerveza en el estadio. Sólo los envíos desde 30 metros de Rafa Márquez conseguían poner de los nervios a la tosca defensa neozelandesa.
Sin creación en el centro del campo, el encuentro se convirtió en un partido de tenis. Un disparo lejano de Rodríguez, que guardameta y larguero se encargaron de neutralizar, supuso la mejor ocasión para los locales en la primera media hora. Pero un follón en el área , con Moss en el suelo tras chocar con uno de sus defensas, era aprovechado por Paul Aguilar para, libre de marca, empujar la pelota a la red.
Nueva Zelanda , que confiaba en volver a su tierra con un empate a cero que la mantuviera con vida, se vino abajo tras el gol. Las ocasiones mexicanas se acumularon hasta que otro balón suelto en el área, tras un saque de esquina, lo hacía pasar Raúl Jiménez entre los tres palos con un preciso toque de cabeza. El «Cielito lindo», a coro de cien mil voces, espoleó aún más al equipo de casa, mientras al cuadro visitante se le hacían horas los interminables minutos finales del primer tiempo.
Los «kiwis» también tienen como base a un equipo local, el Wellington Phoenix . Una lesión excluía de la convocatoria a su figura más destacada y capitán, Winston Reid, del West Ham United, y entre los otros seis seleccionados que juegan en ligas europeas apenas si destaca Bill Tuiloma, defensa del Olympique de Marsella. Con tales mimbres, Ricki Herbert no modificó la alineación tras pasar por los vestuarios, aunque sí estiró un poco el diagrama en la pizarra. Con las líneas más abiertas, bastaron dos minutos para que otro buen pase teledirigido de Márquez lo recibiera Miguel Layún en banda izquierda y éste le pusiera el balón en bandeja a Oribe Peralta, quien, desde el área chica, fusilaba a Moss.
El 3-0 forzó a los «all blacks» a buscar la portería contraria, con tres delanteros de refresco, pero apenas sirvió para poner en evidencia sus manifiestas carencias técnicas . Muy cómodos en su terreno, los hombres de «El Piojo» Herrera lanzaban contragolpes que, convertidos en goles, terminaron por arrojar a Nueva Zelanda sobre la lona. La selección mexicana aún está lejos de ser un buen equipo de fútbol (el gol de la honra neozelandés puso de nuevo en evidencia a la defensa), pero, por lo menos, ya no hace el ridículo en los momentos decisivos y ante rivales de menor entidad.
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