La Liga saluda al nuevo San Mamés

El espectacular estadio se estrena con sólo tres cuartas partes construidas y un aforo que esta temporada únicamente permite albergar los algo más de 36.000 socios del club. No será hasta la primavera de 2015 cuando la obra esté concluida en su totalidad y estén disponibles sus más de 53.000 asientos .

El nuevo santuario rojiblanco lleva el mismo nombre que su predecesor, San Mamés, la misma denominación que tenía el hospicio junto al cual se levantó el antiguo estadio inaugurado en 1913 cerca de la orilla de la ría de Bilbao. Cien años después de su construcción, el antiguo estadio de San Mamés bilbaíno fue derribado este verano para dejar paso a una nueva «catedral», que el Athletic y sus aficionados inauguran este lunes con ganas de perpetuar el culto al buen juego y al fair-play.

La parte que queda por construir es el fondo que se levantará sobre los terrenos donde se asentaba la Tribuna Principal y una parte del césped del viejo San Mamés, cuyo espíritu se ha intentado trasladar en un imponente edificio dominado por el color rojo de los asientos, el verde del césped y el blanco de su exterior.

Poco más de tres años después de de colocarse la primera piedra, el 26 de mayo de 2010 , finalizará la primera fase de este proyecto sustentado económicamente por el Athletic, la Diputación Foral de Vizcaya, el Gobierno vasco, la entidad financiera Kutxabank y el Ayuntamiento de Bilbao.

Ernesto Valverde ha tenido la posibilidad de realizar dos entrenamientos en la que desde este lunes es su nueva casa, el último de ellos el pasado viernes ante más de 10.000 aficionados que ya hicieron sentir a los futbolistas que se trata de un estadio donde la presión del público puede palparse con intensidad a ras de césped.