IDA DE LA SUPERCOPA
Neymar da aire al Barça
El brasileño se estrenó de cabeza y niveló el golazo de Villa después de una noche espesa de los azulgrana (1-1)
ENRIQUE YUNTA
La primera entrega clandestina de la Supercopa resultó de lo más intensa, encendido el Calderón en otra noche grande de su nueva era feliz. No hay un escenario más pasional para un partido así y el Atlético de Madrid, por fin convencido de que ... es un grande, enterrada de una vez por todas la leyenda agorera del pasado, aceptó con orgullo la batalla ante el todopoderoso Barcelona, un equipo a medio hacer y pesado en pleno agosto mes de agosto. [Así lo hemos contado]
Asfixiado por el calor estival, con el mercurio por encima de los treinta grados pasada la medianoche, al conjunto azulgrana —con la camiseta senyera para la ocasión— le costó horrores poner buena cara en la primera cita seria del curso y salvó el tipo gracias a Neymar, protagonista en el tramo final con un tanto que desequilibra la eliminatoria. El Camp Nou decide el próximo miércoles, también en horario intempestivo, el primer título de esta temporada.
Se la complicó de mala manera durante algo más de una hora el Atlético, fiel a todo lo que quiere Simeone desde que aterrizó como salvador de un escudo cuestionado. Hay nervio en el Manzanares, entrega y amor propio, sacrificio y solidaridad en busca de un bien común. Ayer dio un paso atrás y prefirió proteger su cueva muy cerca de Courtois, pero a cambio junto sus líneas para dejar sin aire a los creadores del Barça, cómodo siempre en su guarida.
No hubo ni rastro de Xavi , muy apagado sin que sea una novedad últimamente, Iniesta está falto de ritmo y el ataque fue de lo más previsible. Pedro y Alexis no mezclaron con un Messi apático y Neymar observaba desde el banquillo en su nuevo rol de secundario, decisión controvertida de Martino porque al brasileño se le fichó como una estrella y de momento no entra en la rueda. Por mucho que el técnico pida paciencia, hombre de palabra que hasta ahora apuesta por los galones, el entorno no la tiene y e xige una brizna de la magia de Neymar, algo diferente para regenerar la ilusión . Cuando entró, dio alas a los que le reclaman.
Le dejó hacer el Atlético sin miramientos, despreocupado de lo que pasara con la pelota porque entendía que no podía ganar la pelea de la posesión. Su ruta hacia el festejo pasaba por una contra y la que trenzó en el minuto 11 es de manual, lo que siempre se debe hacer cuando se roba una pelota. Rapidísimo en la transición, a la velocidad de la luz se plantó en la zona de Valdés y Arda y Villa combinaron para regalar un golazo antológico , un golazo para encumbrar el impagable olfato del asturiano.
La empaló desde la frontal, un remate de primeras con el alma, desatado a la hora de celebrar ante sus ex. Y, por descontado, desde ya se habla de su precio, de los 2,1 millones que ha costado hasta la fecha. Nunca el gol, garantía absoluta en este delantero, salió tan barato.
Bajón del Atlético
Se consumió el Barcelona sin que nada ni nadie alterara el guión. Fue plano, gris tirando a negro, un grupo desenganchado después del empacho liguero del domingo ante el Levante mientras el Atlético, saciado, se asentaba con criterio hasta el descanso. Tácticamente se impuso en el primer asalto e incluso creció en la reanudación, liberado al comprobar que Messi se quedaba en el vestuario por precaución y que Cesc, el relevo, tampoco era capaz de alterar el orden rojiblanco. Mal negocio para el Barça.
Revolucionado el encuentro, y con el Atlético decidido a buscar algo más, la noche sirvió para encumbrar a Neymar, a quien Martino le concedió media hora con la imposición de resolver el jaleo. Su primer gol estrenando camiseta llegó de madrugada, imprevisible aparición con la cabeza para encumbrar el buen centro de Alves y para sonrojar a Juanfran, nefasto en el marcaje. Cuando peor lo pasaba el Barcelona, un soplo de aire fresco, Neymar da vida y desnivela la vuelta del Camp Nou.
A partir de ahí, a mbos se dejaron llevar sin mayor ambición que la del empate , satisfechos a partes iguales. El Atlético, sin que los cambios ayudaran, no tenía más en los pulmones después de una hora de muy buen nivel y el Barça se contentaba con un resultado buenísimo por los méritos exhibidos. Le queda la buena noticia de Neymar, lo más destacado para sus propios intereses, pero la certeza de que aún no está fino y de que Messi tiene más problemas físicos que antes.
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