Hamilton y Mercedes se enquistan en la renovación

Tal vez el anuncio de renovación con Mercedes de Hamilton sea inminente o se alargue hasta convertirse en un dilema que fracture la pretemporada de la F1. La única realidad es que de momento no hay acuerdo y que, o corren mucho, o Hamilton cumplirá 36 años el próximo 7 de enero sin un compromiso firmado para continuar en la escudería con la que ha conquistado seis de sus siete títulos mundiales.

Tanto se ha enquistado la renovación de Hamilton que en este tiempo ha variado el reparto accionarial de Mercedes Fórmula 1, una escudería con sede y dos fábricas en Inglaterra (Northampton y Brackley). Hasta el pasado 18 de diciembre, Mercedes F1 era propiedad de Daimler, la matriz de la multinacional alemana de la estrella. Pero desde esa fecha, la propiedad del equipo está repartida al 33 por ciento entre Daimler, Toto Wolff (el CEO del equipo y manager del segundo piloto, Valtteri Bottas) e Ineos, la petroquímica que también posee la mejor escuadra ciclista del mundo.

Con todo el año de la pandemia para sellar un entendimiento, Hamilton y Mercedes han cruzado 2021 sin cristalizar las conversaciones, lo que da idea de que el asunto no era tan banal como han querido hacer ver.

Según informó El Corriere dello Sport, Daimler habría bloqueado el nuevo contrato de Hamilton después del GP de Turquía (15 de noviembre). El campeón del mundo habría pedido 50 millones anuales en un acuerdo de cuatro años: 200 millones.

La pandemia

Condiciones económicas potentes en tiempos de pandemia para el sector de la automoción, que debe lidiar con grandes desafíos financieros y laborales para mantener la competitividad. Mercedes le habría ofrecido dos años. En 2022 cambiará la reglamentación técnica de la F1 en una maniobra que se interpreta decisiva para frenar la hegemonía apabullante de Mercedes, campeona los últimos siete años (seis Hamilton y uno, Nico Rosberg) . Las declaraciones de los protagonistas inducen al acuerdo. «Queremos continuar este viaje. Lewis, el equipo y yo no hemos terminado», dice el patrón de Mercedes, Toto Wolff. «Quiero seguir en 2021», soltó Hamilton en la última carrera en Abu Dabi. «Lewis es un gigante y su influencia es enorme dentro y fuera del coche. Todavía hay más por venir», expresó el futuro responsable de la F1, Stefano Domenicali.

El piloto británico consiguió que Mercedes decorase de negro el coche campeón, en referencia a la lucha anti-racial del Black Lives Matter. Influencia total de Hamilton, que se ha mostrado este curso pletórico en la pista y en su faceta como activista del ecologismo y los derechos sociales. Pero entre medias se ha cruzado George Russell, el piloto que lo sustituyó en Bahréin (Hamilton pasó el virus) y que, obvio, sería más barato que el jerarca total de la F1.