Philipsen demuestra su fortaleza en un peligroso final marcado por las caídas

Tras una jornada muy tranquila, en la que ni siquiera se formó una fuga hasta pasados los 100 primeros kilómetros, de nuevo Philipsen aprovechó un lanzamiento excelso de su compañero neerlandés Mathieu Van Der Poel para ser el más rápido en un esprint de foto 'finish' sobre el australiano Caleb Ewan (Lotto Dstny).

En una etapa que los velocistas tenían marcada en sus calendarios, el pelotón salió muy tranquilo, sin intento alguno de escapada en los primeros kilómetros. De hecho, no hubo cambios de guion hasta el kilómetro 60, cuando el viento hizo acto de presencia y casi se forman abanicos, pero los favoritos los salvaron con maestría.

En el esprint intermedio, Philipsen fue el más rápido, sumando 20 puntos que le colocan como líder del maillot verde de la regularidad, empatado a puntos con el francés Victor Lafay (Cofidis) y el australiano Caleb Ewan (Lotto Dstny).

A falta de ochenta kilómetros para meta, el dúo francés formado por Anthony Delaplace (Arkea Samsic) y Benoit Cosnefroy (AG2R Citroen Team) se marchó por delante, pero su minuto de margen fue insuficiente y el ritmo del Soudal Quick Step al frente del pelotón fue superior a ellos, y les neutralizó a veinticinco de meta.

Con todo el mundo agrupado, el grupo se lanzó a alta velocidad hasta Nogaro, donde en el último kilómetro se fue al suelo el neerlandés Fabio Jakobsen (Soudal Quick Step), uno de los favoritos. En la llegada surgió desde atrás Philipsen, que aprovechó el lanzamiento de Van der Poel para imponerse a Ewan de forma muy ajustada y lograr su cuarta victoria de etapa en el Tour, la segunda de esta edición.

En la clasificación general, el inglés Adam Yates (UAE Team Emirates) se mantiene líder con seis segundos de ventaja sobre su compañero el esloveno Tadej Pogacar, misma diferencia que sobre su hermano Simon Yates (Jayco Alula).

Este miércoles vuelve la montaña a la 'Grande Boucle' en la quinta etapa con los Pirineos, en un día en los que los ciclistas recorrerán 163 kilómetros entre las localidades de Pau y Laruns. Los corredores ascenderán dos puertos de gran dureza como el Col de Soudet y el de la Marie-Blanque.