Los velocistas disfrutan y Landa prepara el asalto final a Carapaz

Tarde de giros inesperados pues, al poco del inicio, se conoció que Joao Almeida , que ayer perdió prácticamente todas sus opciones de triunfo en la montaña, comunicó que abanadona la competición tras dar positivo en Covid. Hindley, segundo clasificado, tuvo problemas técnicos (aunque sin repercusión en la clasificación) y Mikel Landa se prepara para su asalto final al liderato de Carapaz. Solo quedan tres etapas.

Respira tranquilo el pelotón, aliviado tras el tortuoso paso por los Alpes . Etapa de transición, llana y bucólica, territorio de caza para los corredores. No estuvieron todas las balas atinadas sin embargo y fueron los valientes, los que rompen las estretagias, los que ponen curvas a la planicie, quienes pisaron el acelerador.

Juanpe López, tras portar el rosa durante diez etapas, sigue a la baja. El español no ha conseguido mantenerse en la cima de la general y en el camino entre Borgo-Vulsugana y Treviso , 151 kilómetros por el noroeste de la bota, cerca de Venecia, siguió con esa tendencia y perdió cerca de dos minutos.

Jornada de nervios también para el australiano Jai Hindley, principal perseguidor de Carapaz, líder del Giro. El de las Antípodas sufrió problemas técnicos en los últimos kilómetros, aunque finalmente mantuvo los tres segundos de distancia en la general con el ecuatoriano. Mañana vuelve la ladera, dos puertos de tercera categoría, que se antojan decisivos para el desenlace del Giro.