Joventut 73 - 94 real madrid

Un Real Madrid impecable se clasifica para la final de la ACB

Los blancos, con una actuación redonda en ataque y en defensa, doblegan al Joventut en el cuarto partido de las semifinales

Estadísticas del partido

Musa, defendido por Birgander en una entrada a canasta ACB

12/06/2023
Actualizado a las 23:04h.

Un Real Madrid de matrícula se impuso en el cuarto partido de las semifinales al Joventut (73-94) y se clasificó para las finales de la ACB, impecables los blancos en ambos lados de la cancha, témpanos ante la opresiva grada catalana. Liderados de nuevo ... por Sergio Rodríguez, los madridistas aguantaron el empuje inicial de sus rivales y, cuando notaron flaqueza en sus piernas, los aplastaron con un baloncesto de categoría. Ya espera rival el Madrid, pendiente del Málaga-Barcelona de este martes. Si ganan los azulgranas, habrá clásico en la final.

El Madrid solo quería que Kyle Guy no anotara. La actuación del estadounidense en el primer partido de la serie (30 puntos) hizo que la defensa orquestada por Chus Mateo se centrara de manera casi absoluta en el escolta. Funcionó en el tercer envite, pero en el cuarto aparecieron los espacios. Se aprovecho el Joventut de la obsesión blanca y, gracias a su acierto desde la línea de tres, comenzó con buen pie el decisivo partido.

Mucha igualdad en los primeros minutos, con los catalanes bailando al ritmo caribeño de Feliz y con el Madrid repartiéndose protagonismo, bien hilado por Hanga, que una vez más vuelve a estar espectacular en el tramo decisivo de la temporada. El Chacho se daba un homenaje en el día de su cumpleaños (37, pero como si fueran 22, como le gusta decir) y ningún bando conseguía saber si era presa o cazador.

Bajaba el Madrid al barro sin miedo, consciente de que no podía dejar crecerse a los locales en el plano emocional, aupados por una grada enfervorecida y muy fina en lo verbal (los árbitros y su propio club le prohibieron llamar «asesino» a Yabusele y comenzaron a cantarle «MVP»). Se descentró el pívot francés, algo irregular en el lanzamiento, y fue Musa quien cogió el liderazgo anotador de los visitantes, siempre con una sonrisa pícara en su rostro tras sus genialidades.

Por sorpresa, fue Williams-Goss quien rompió el partido con cuatro puntos consecutivos, imparable el estadounidense a campo abierto y muy rentable en defensa. Tras dos años de más sombras que luces, parece haber calado el espíritu del Madrid en el base. Ya tiene el gustillo innato por crecerse ante las adversidades, de soltar una carcajada cuando le desafía la lógica. Mientras, la defensa blanca, inexpugnable como un muro penitenciario, frustraba de lo lindo al Joventut, que se quedaba sin tiempo y sin ideas.

Liderazgo de Rodríguez

Los blancos se gustaron en el último cuarto, bellas partituras que acabaron por cabrear a Feliz, que estuvo a punto de prender una tangana tras recibir una falta de Sergio Rodríguez, sancionada con una antideportiva para el canario y otra para Hezonja, que se tiró como un búfalo para evitar que la situación se desmadrase. Sin embargo, ni eso descentró a los blancos, que con la dirección del Chacho y con la decisión de Yabusele pasaron el bache sin problemas para abrazar la final de la ACB.