El misterioso hombre sin móvil que disfrutó sin pantallas del histórico récord de LeBron James

Fue entonces cuando la grada se inundó de móviles. Cientos de cámaras en miniatura con las que inmortalizar un momento único. Histórico. Dispositivos que aparecían en cada mano, literalmente, sobre todo en la zona más cercana a la cancha. Una imagen icónica, que recuerda a la que inmortalizó a Michael Jordan en su día cuando la leyenda de los Bulls le dio a su equipo el anillo.

Como si hubiera sido extraído de aquellas finales de 1998, un espectador permanece impasible y feliz justo en el momento en el que LeBron James se levanta para anotar. A su alrededor, un mar de móviles que inunda la escena y que le recorta de manera singular. Único en su disfrute, pues solo él y un puñado de personas que se cuentan con los dedos de una mano vivieron sin pantallas el momento en esa zona del campo.

Su rostro forma ya parte de la historia del lanzamiento más famoso de LeBron James. Un 'fade away' marca de la casa con el que superó a Kareem Abdul-Jabbar como el máximo anotador de la NBA. Vestido de negro y con el pelo canoso, el misterioso hombre quedó inmortalizado para siempre como el del disfrute analógico. Fotografía del instante que él optó por grabar en su mente en lugar de en su teléfono.

No tardaron las redes en hacerse eco del misterioso personaje, pero fue Maria Sharapova, extenista número uno del mundo, la que desveló su nombre. «Phil Knight. Sin pantalla. No era necesaria», escribió la exdeportista en su cuenta de Instagram. Un mensaje que le dio contexto al segundo rostro más famoso de la noche -con permiso de LeBron-.

Knight es uno de los fundadores de la marca deportiva Nike, a la que LeBron está unido desde hace dos décadas. Su fortuna es una de las más importantes de Estados Unidos, lo que le permite ocupar un lugar tan privilegiado en un momento tan clave de la historia del baloncesto. Porque esos asientos que ocupa Knight se cotizaban antes del partido a 75.000 dólares cada uno. Migajas para la cuenta bancaria del directivo, donde acumula más de 30.000 millones según Forbes.

Knight estaba sentado al lado de la familia de LeBron, cuyos hijos sí que exhibieron su móvil para grabar la jugada más famosa de su padre. Phil saludó después a James, que le agradeció estar presente en el partido. «No me lo hubiera perdido por nada del mundo», dijo el presidente de Nike.

Retirado hace tiempo (aunque sigue ocupando la presidencia del Consejo de Administración de la empresa), su amor por el deporte hace que sea un fijo en todos los grandes eventos celebrados en Estados Unidos. Ahora le será más complicado pasar desapercibido, pues su rostro ha dejado de ser anónimo para convertirse en el del hombre que prefirió disfrutar sin pantallas del récord de LeBron James.