Triunfo de prestigio del Gran Canaria ante el Valencia Basket

Los pupilos de Pedro Martínez, que fueron prácticamente siempre por delante en el marcador en este primer cuarto, cerraron el mismo con una exigua renta de tres puntos (26-23), tras una postrera canasta del pívot galo Louis Labeyrie.

El Herbalife tuvo un comienzo fulgurante en el segundo parcial merced a cuatro triples consecutivos anotados por Strawberry y Eriksson (3), con lo que consiguió un parcial de 12-0, aunque cinco puntos consecutivos de Valencia impidió al equipo isleño poner más tierra de por medio (38-28).

Pese a todo, el Gran Canaria, muy intenso y sin dar señales de cansancio pese a haber jugado el pasado jueves por la noche en Israel, se fue al descanso con una cómoda renta (56-39), ante un rival incapaz de parar el vendaval ofensivo de los de Pedro Martínez.

Valencia salió a por todas tras el descanso y, merced a sendos triples de Tobey y Van Rossom, y una acción posterior de 2+1 de San Emeterio, recortó la diferencia (60-48), aunque no fue más que un espejismo, porque el cuadro grancanario con dos triples de Hannah y Strawberry y dos puntos más de Wiley se fue de 20 (68-48).

Los espectadores grancanarios disfrutaban con el acierto ofensivo de su equipo y la intensidad defensiva mostrada por todos los jugadores, y el Herbalife, también pletórico físicamente, volaba sobre Valencia (81-60).

Los isleños metían prácticamente todos los balones francos que les llegaban en ataque, especialmente por parte del infalible Eriksson, ante un conjunto valenciano en el que solo cabía destacar las ganas y los puntos de Will Thomas con lo que el choque se iba al último cuarto con un claro 88-64.

Gran Canaria se mantuvo muy centrado e intenso en los primeros compases del último parcial, y un triple de un entonado DJ Strawberry propició que rebasase los 100 puntos con algo más de seis minutos para el término del choque (101-76).

Rebasado el ecuador de este periodo, los insulares se iban de 28 con otro triple de Eriksson (104-76), que poco después era cambiado para darle un respiro ante la ovación de los seguidores locales, que acabaron el choque aplaudiendo puestos en pie, reconociendo el gran encuentro de su equipo.