acb
Un luchador llamado Pete Mickeal
guillermo d. olmo
Pete Mickeal o el ave fénix. A sus 35 años, el alero estadounidense se enfrenta a una nueva dificultad en su carrera. Ayer se supo que Mickeal, una de las piezas claves del Barça Regal campeón de los últimos años, se perderá lo que resta ... de temporada a causa de un tromboembolismo pulmonar, una enfermedad que ya padeció hace dos años y que ya entonces estuvo a punto de tumbar deportivamente al gladiador de Rock Island.
La ausencia de Mickeal en el triunfo del Barça ante el Cajasol de Aíto levantó todo tipo de suspicacias. En el partido previo de Euroliga ante el Caja Laboral protagonizó un desplante público a su entrenador cuando este ordenó sustituirlo. Xavi Pascual decidió castigarlo haciéndole calentar banquillo hasta el final del choque, así que cuando los servicios médicos del club anunciaron que Mickeal era baja para el compromiso de Liga Endesa en Sevilla a causa de una extraña gripe, muchos pensaron que lo que había detrás era una crisis interna en el vestuario azulgrana. Los comentaristas más osados llegaron incluso a apuntar a que el incidente estaba relacionado con una supuesta petición de aumento de sueldo del jugador de Illinois.
Pero el último parte médico desveló la peor noticia y la tristeza ha acabado con la polémica. La gripe era algo más grave y el Barça Regal pierde a uno de sus baluartes. Para el jugador, ya muy veterano, se abre una nueva travesía del desierto.
Mickeal es un ganador, un jugador con el carácter suficiente como para retar al mismísimo Kobe Bryant y ganarle el pulso, un líder en la cancha de esos que quieren la bola decisiva pero que tampoco se esconden en la defensa y el juego subterráneo. Muy recordado es su pique con Carlos Suárez en la última final de Liga contra el Madrid, un pique que terminó con los azulgrana proclamándose campeones.
Clave en la Copa
Ahora, otra vez, se ve obligado a una trabajosa resurrección deportiva. No es la primera vez, ni siquiera es la primera vez esta temporada. De hecho, el alero pasó muchos meses lejos de su nivel habitual después de completar su primera recuperación del tromboembolismo dichoso. No faltaron las voces que en el entorno culé lo dieron por acabado. A su edad, pocos confiaban en que volviera a ser el jugador decisivo que fue en Vitoria y en sus primeros tiempos en el Palau. Pero hubo alguien que nunca dejó de creer en Pete Mickeal, él mismo. Cuando más lo necesitaba su equipo, en plena crisis de resultados y con Navarro mermado por sus problemas físicos, emergió en la Copa del Rey para ser uno de los pilares de la conquista del título y ser designado MVP de la Copa.
El ex de Baskonia, Leche Río Breogán, y Peristeri griego, entre otros, estaba alcanzando de nuevo su mejor nivel, una mejora que coincidía con el aumento de la fiabilidad de su equipo, clasificado ya para los cuartos de final de la Euroliga y capaz de corregir su errático rumbo inicial en la competición doméstica. Quizá por eso lo exasperó tanto que Xavi Pascual lo sustituyera poco antes del descanso ante los de Zan Tabak. El Barça ya busca un sustituto para cubrir el vacío de los 10.1 puntos y los 4.5 rebotes que estaba promediando por partido. Pero tanto Joan Creus como Pascual saben que el hueco de Pete trasciende lo estadístico. Es un líder en el vestuario, un jugador que siempre da un paso adelante en los partidos importantes y que se crece en la adversidad. Ahora tendrá que hacerlo una vez más, aunque lejos de las canchas.
Un luchador llamado Pete Mickeal
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete