Pepe Murcia: «Borramos el fantasma del descenso y pusimos la semilla para los éxitos posteriores del Atlético»

-¿Se quedó con una espina clavada por no poder continuar?

-Yo no lo llamo espina, pero me hubiese gustado seguir. Creo que nos ganamos la posibilidad de seguir, pero quizá el venir de la cantera, no tener ese perfil de un nombre... Me extrañó muy mucho no darme la posibilidad de seguir cuando después sí hubo gente que repitió. Pero no me quedo en el pasado.

-¿La falta de nombre influyó?

-Es la duda que tengo. Las personas que decidieron optaron por otra vía. No sé si influyó el nombre, pero creo que con el rendimiento del equipo y con conseguir el objetivo no pudieron poner ninguna pega.

-¿El objetivo que le marcan era simplemente salvarse?

-Sí. Había que cortar la hemorragia que tenía el equipo y así lo hicimos, desde la normalidad. Le dimos la tranquilidad que había que darle a los futbolistas, que la calidad la tenían, porque hay que recordar que había jugadores mundialistas ese año como Leo Franco, Antonio López, Pablo, Maxi, Kezman, por supuesto Fernando Torres...estaba Perea, Luccin, Ibagaza, Petrov... Era un equipo bastante competitivo que podía haber hecho algo más.

-¿Se veía en Torres a un futuro entrenador?

Tenía 21 años y ya era el capitán. Tuve la suerte de estar hace poco con él y hablar un rato y le he visto partidos del Madrileño y me gusta muy mucho. Fernando no ha cambiado nada, sigue siendo el más sencillo del mundo, sabiendo lo que ha sido para el fútbol y para el Atlético, un atlético de corazón, que es difícil encontrar hoy en día. Creo que si sigue el camino que se ha marcado, tenemos un gran entrenador en ciernes.

-Usted cogió un equipo hundido y logró seis triunfos consecutivos.

-Era un Atlético muy diferente al actual y no fue nada fácil. Esos seis triunfos reflotaron al equipo, porque cuando me hice cargo era una situación delicada y aparecían los fantasmas de años atrás... Esos fantasmas se disiparon en siete semanas, pero a partir de ahí era año de Mundial, la plantilla había sufrido mucho, el equipo se estabilizó y quizá nos faltó a todos algo más de ambición. Pero se consiguió el objetivo y creo que en ese equipo de la 2005-2006 pusimos una semilla para los éxitos posteriores.

-¿A qué semilla se refiere?

-La semilla fue quitar el fantasma de un posible descenso, que no se volviera a repetir esa gran decepción como club que había pasado apenas seis años antes. Poniendo mucha normalidad, y con una gran actitud de los futbolistas, demostramos que la temporada tendría que haber sido diferente si todo el mundo hubiera puesto más de su parte desde el principio. Pero entonces no era una etapa tan estable como es hoy.

-¿Qué inestabilidad se percibía en esa época?

-Hoy en el club la cúpula directiva y deportiva transmiten a la plantilla y al cuerpo técnico tranquilidad, serenidad y seguridad en todo. Fuera del club cuando se perdió con el Lille y el Betis parecía todo perdido, era un desastre, pero en el club se respira tranquilidad aunque por fuera se trate de desestabilizar. El club transmite estabilidad y eso llega al vestuario, a los jugadores, al aficionado, y hace crecer al club. No quiero entrar en detalles, pero en mi época se escuchaba mucho y se hacía mucho caso a todo lo que rodeaba al club. Pesaba mucho lo que se decía fuera. Hoy lo que se hace es que se escucha mucho a lo de dentro, las conversaciones son de puertas para dentro, y eso ha permitido a Simeone lograr grandes cosas.

-Hablemos del partido. ¿Qué recuerda de aquella última victoria en el Camp Nou?

-Veníamos de ganar al Zaragoza 0-2 y al Deportivo 3-2 e íbamos con mucha confianza y sin tener que tocar mucho el aspecto motivacional ante un Barça que ese año quedó campeón de Liga y de Champions. El equipo estaba en niveles altos emocionalmente, así que nos centramos en lo técnico-táctico, en cómo le podíamos buscar las cosquillas al Barça y tuvimos el acierto para hacerlo.

-¿Cómo fue el planteamiento?

-Había que saber maniatar al Barça, que ya jugaba mucho con la posesión. Salimos a presionar, a salir al contraataque, pero sin meterse atrás. Había que arriesgar subiendo mucho la línea de presión. Hicimos todo lo que había que hacer bien, con el compromiso de todos, para ganar a un equipo tan fuerte como el Barcelona.

-Si le dicen que el Atlético no volvería a ganar allí, ¿qué habría dicho? ¿Ve alguna razón?

-Habría dicho que imposible. Por buscar alguna razón, tuvimos que vivir la etapa Messi, que fue duradera. Messi era más que un plus en un equipo como el Barça, ya plagado de súper mega estrellas. No creo que haya más razones. Son números, pero todos estos años también hemos conseguido dos Ligas, una Copa, tres Europas League. Para mí es algo anecdótico.

-Estos días se debate sobre si Simeone dará un paso atrás.

-Lo primero es mostrar un respeto a la idea de Simeone. Se le ha calificado mucho de amarrategui y mira los últimos resultados: muchísimos goles a favor y muy pocos en contra, el menos goleado de la Liga. Podemos entrar en el debate de si te gusta más o menos su estilo, pero no puede haber debate en respetar sus formas.

-¿Cómo piensa que saldrá?

-Tengo dudas de lo que hará el Cholo. No sé si preferirá presionar más arriba o más atrás, si buscará asociarse más con balón, o salir a la contra. Pero sí tengo claro que con Flick el Barcelona va a salir a jugar como siempre, adelantando mucho la línea y estrechando mucho las distancias. Y el Cholo seguro que sabrá cómo aprovechar los espacios de esa línea adelantada y cómo salir de su presión alta.

-¿El cambio al 4-4-2 ha sido clave?

-Por encima de los sistemas hay algo mucho más importante que es la actitud de los futbolistas. Pero es cierto que con el 5-3-2 no se han conseguido los mismos resultados que ahora. En su trayectoria el Cholo ha conseguido muchas más cosas con el 4-4-2, llegar a finales, ganar campeonatos. Se trata de sacar el mejor rendimiento en función de la plantilla que tengas. Pero los datos están ahí y dicen que con el 4-4-2 el Atleti siempre ha sido más reconocible.

-Giuliano está en el foco por ser el hijo de Simeone, pero se ha ganado el puesto.

-Está claro que la repercusión que tiene no es por llamarse Simeone, sino porque es un grandísimo trabajador, de casta le viene al galgo. Está en el foco por su rendimiento. Hay que respetar mucho su trabajo, su entrega, su sacrificio. Pero también nos puede sorprender Javi Galán, que venía de estar cedido, con dudas del club, y ahora está dando un gran rendimiento.

-Barrios también crece, pero Koke está siendo suplente.

-El Cholo es inteligente y sabe manejar estas situaciones y sacar rendimiento a cada jugador y hacerles sentir partícipes a todos. Barrios puede marcar un camino como el que ya hizo Koke y Koke aún puede ser un apoyo muy grande para que Barrios se desarrolle con mucha más confianza, sin la obligación de tomar la manija en un equipo como el Atlético. Creo que los dos tienen hueco y el Cholo sabrá darles su protagonismo.