Griezmann, el degradado mejor jugador de la Liga

Por fin, a primeros de octubre Barcelona y Atlético llegaban a un acuerdo para cerrar el traspaso de Griezmann, rompiendo cláusulas y cronómetros. Y sólo unos días después, ya con 90 minutos, lo celebraba en San Mamés con el gol que daba el triunfo a los suyos y dirigía a la afición unas palabras que muchos anhelaban.

«Pedir perdón, sé que mucha gente lo quiere escuchar de mi voz, por todo el daño que pueda haber hecho a la gente. Pero el perdón que más quiero dar es en el campo», decía el galo, que en cualquier caso llevaba ganándose esa disculpa con trabajo y con gestos desde que volviera a vestir de rojiblanco. Cada partido de casa desde la temporada pasada Antoine da una vuelta al Metropolitano aplaudiendo a la gente por su apoyo, independientemente del resultado o de su actuación.

Pero sobre el campo se está ganando el perdón con mayúsculas. Es el futbolista de la Liga que más asistencias de gol ha dado, ocho. Tiene cerca a Mikel Merino (siete), pero aventaja en mucho a jugadores como Dembelé, Balde, Rodrygo o Aleix García, que aparecen con cinco. Es el segundo jugador de todo el campeonato con más participación en goles, 17.

Suma nueve tantos, dentro ya del Top Ten del campeonato, y con sus ocho asistencias está sólo detrás del Pichichi Robert Lewandowski, que acumula 15 goles y cinco asistencias. Sin embargo, mientras el francés no para de crecer, ha logrado tres goles y dos asistencias en los últimos cinco partidos, el polaco está en pleno declive: apenas ha marcado dos goles en las últimas 14 jornadas.

Para los amantes de la estadística moderna, Griezmann también lidera el ranking de jugadores con más ocasiones claras creadas. Hasta 14 oportunidades de gol ha fabricado para sus compañeros (aquí no cuentan sus propios goles), según datos de Atlético Stats.

Su crecimiento es espectacular, ya que en toda la Liga pasada apenas marcó tres goles y repartió cinco asistencias, cifras que ha pulverizado en apenas dos tercios del campeonato.

Ahora mismo, todo pinta de color de rosa para Griezmann en el Atlético de Madrid, como su pelo, look con el que lleva ya casi tres meses. Pero su seleccionador, Didi Deschamps, le ha dado un disgusto. Con el adiós a Francia de los capitanes, Lloris, Varane y Benzema, todo apuntaba a que Griezmann, con 117 internacionalidades y 32 años, sería el heredero del brazalete. Sin embargo, el elegido ha sido Kylian Mbappé, con sólo 24 años y 51 partidos menos en la selección. Antoine, que lideró a su selección en el Mundial, retrasando su posición y sacrificándose en defensa, siente ahora que su esfuerzo no se ha visto recompensado.

De hecho, Mbappé, en rueda de prensa ha hablado sobre la situación de la capitanía: «Antoine está decepcionado y es comprensible, yo habría tenido la misma reacción. He hablado con él, es el jugador más importante de la era Deschamps e iremos de la mano para llevar a la selección a lo más alto», aseguró el astro galo.

Este viernes, en el inicio del camino a la Eurocopa de Alemania 2024 y sin brazalete, Griezmann se enfrentará a Países Bajos, donde el delantero coincidirá con Memphis, su nuevo socio en el ataque del Atlético de Madrid. Un club en el que es feliz y no para de ganar galones.