El amigo de Rubiales esquivó dos veces a la UCO antes de ser detenido el pasado 2 de abril

Según revela un oficio policial recientemente incorporado al sumario de la causa, al que tuvo acceso ABC, la Guardia Civil contaba con detener a Nene el pasado 20 de marzo, cuando explotó la operación Brody y se practicaron detenciones y entradas y registros en distintos puntos del territorio nacional, incluida su vivienda y el hotel que regenta en Granada. También su mujer recibió visita de la UCO.

Aquel día, el empresario tenía una reserva en un vuelo que llegaba a Madrid desde Punta Cana cerca de las once y media de la mañana. Sin embargo, justo la víspera pospuso el viaje. Habría de aterrizar el 21 de marzo, también a media mañana. «Ante el imprevisto cambio de reserva, esta Unidad realizó las gestiones necesarias para proceder a la detención del mismo a su llegada legada a España, pero nuevamente, el investigado no ha realizado dicho trayecto», decía el atestado remitido a la juez.

La Guardia Civil solicitó por ello a la instructora que a la comisión rogatoria enviada a República Dominicana para rastrear y bloquear activos financieros de Nene y de Luis Rubiales añadiese una nueva petición: averiguación del domicilio en que se encontraban y una entrada y registro en las dependencias. Se trataba de «obtener nuevos medios de prueba, principalmente documental y dispositivos electrónicos, informáticos, telemáticos», también dinero en efectivo.

La juez Delia Rodrigo aceptó, con informe favorable de la Fiscalía Anticorrupción, atendiendo a que Nene había «anulado recientemente su vuelta a España hasta en dos ocasiones» y al hecho de que «pasa largas temporadas en República Dominicana y está desarrollando actividades comerciales en dicho país». Veía por ello «proporcional, oportuno y necesario la realización de una entrada y registro».

El «allanamiento» se produjo finalmente el 1 de abril y en presencia tanto de Nene como de Rubiales en la casa, una villa «color crema» de dos alturas, con cinco dormitorios y cinco baños, piscina privada y a escasos minutos a pie de la playa y el campo de golf más cercanos. Estaba alquilada por cuenta de una sociedad de Nene. Junto a la vivienda estaba aparcado un Porche Maccan S blanco que resultó ser de Rubiales. Lo había adquirido hacía un mes, mientras la UCO preparaba la operación, por poco más de 35.000 dólares.

El día después del registro, Nene regresó a España en vuelo directo a Madrid y fue detenido según pisó el aeropuerto de Barajas para, a continuación, quedar en libertad, de acuerdo a la documentación que obra en el sumario. Le acompañaba otro individuo que también estaba en la villa mientras se practicaba el registro y al que la Guardia Civil tomó declaración como testigo. Refrendó tanto que Nene y Rubiales vivían juntos en la villa como que compartían proyectos.

El expresidente de la RFEF seguiría el mismo destino ya el 3 de abril. Viajaba de vuelta a España sabiendo ya que cabía la posibilidad de su detención, como en el caso de Nene, y después de conceder una extensa entrevista a LaSexta en la que se quejaba de falta de liquidez por los embargos del juzgado. Llevaba encima, según el atestado policial, «un documento escrito a ordenador sobre la colaboración entre SELA -la sociedad estatal saudí que firmó el contrato para la Supercopa- y la RFEF».