Zenit - Betis: Hoy sin Fekir ni Canales, ¡qué hijos de Putin!

Y antes de empezar, imagen típica. Béticos en la grada visitante. Que igual te invaden el campo del Levante, que van unos cuantos locos a miles de kilometros entre semana, a pasar fresquitoa Rusia, que allí no hay ni mesa camilla.

Y el partido empezó como todos los del Betis, tranquilito, sin muchos goles… A los 8 minutos, falta a Sabaly. El Rey Joaquín pone un caramelito en el área y cabezazo de Guido.

Muy bien empezaba esto y más viendo las bajas tan importantes. Y antes que diese tiempo a pensar en más nada, balón que coge casi en el centro del campo Willian José, se planta al borde del área y golazo ajustado al palo. Ni 20 minutos y 0-2. Putin, ¡di que se suspende esto y todos contentos!

Pero llego cierto relax y reaccionó el Zenit, en el minuto 25. Dzubya, que es más o menos como la Torre Pelli, a veces le centran muy alto y se tiene que agachar incluso. Bueno, allí que se comió a la defensa y recortó en el marcador. Casi estaban echando la repetición del gol cuando Malcom, el que echaron del Barcelona y hoy sería titular, empata en 3 minutos. ¿¿Esto qué es ome ??

El Betis intentó calmar el partido y el Zenit no sabía si seguir o andarse con cuidao con el Betis. Llegó una calma tensa, hasta que en el minuto 41, una gran presión de Ruibal provoca un robo de balón. Se la dio a Guardado, que estaba solo y definió perfectamente para marcar el tercero. Hacía tanto tiempo que no marcaba que no se acordaba ni de cómo celebrar.

Por fin llegó el descanso. A ver si la cosa se calma algo más y se queda la igual.

El segundo tiempo empezó algo más tranquilo, verá tú, tampoco era difícil si no con este ritmo podría acabar el partido 10-10.

El Zenit lo intentaba tímidamente y el Betis casi no eso algún centro peligroso sin rematador. En el 58 el ingeniero realizó los primeros cambios, entraron Carvalho y Tello por Joaquín y O Rei. El Zenit empezó cada vez a crear más peligro y en el minuto 65 estrelló un balón en el larguero que ya todos estábamos viendo dentro, menos mal.

Poco después, en el 68, el Betis intentó reaccionar con un disparo de Ruibal que se marchó cruzado. El partido seguía avanzando con el Zenit sin terminar de crear peligro y con el Betis esperando una contra para matar el partido, que casi llega en el 82. Carvalho roba un balón y espera la llegada de Tello que delante del portero es como los botes de ketchup, nunca sabes por dónde va a salir. Y se marchó fuera.

El último susto fue en el descuento pero ahí estaba el shico Edgar para resolver en el área chica.

Otro gran partido del equipo, que no sólo se acostumbra a jugar cada tres días, sino a ganar.

Dentro de una semana, la vuelta.

¡¡¡Musho Betis!!! Manque Rusia.