Real Betis
El más difícil todavía para alcanzar la Champions
En 2005, el Betis se encontraba a un punto del cuarto, de nuevo el Sevilla, mientras que ahora está a cinco y el goalaverage favorable a los de Nervión
Fue en la trigésimo séptima jornada, la penúltima, cuando se produjo el vuelco en aquella histórica campaña
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Iniciar sesión«Mientras las matemáticas lo permitan...». Es la frase que se repite en todos los estamentos del Real Betis Balompié. La gran temporada que el primer equipo verdiblanco está completando, alcanzando los octavos de final de la Liga Europa y habiendo levantado el título de ... la Copa del Rey, lo que ya le permite ser equipo de la segunda competición continental para la próxima temporada 22-23, puede tener un final más feliz todavía. Es verdad que es complicado, por el simple hecho de que el equipo bético no depende de sí mismo, pero, después de la victoria del martes en Mestalla y del resultado precisamente del Sevilla en su partido contra el Mallorca en el Sánchez-Pizjuán, hacen que la cuarta plaza, al menos en lo que a números se refiere, sea aún posible de conseguir por los verdiblancos en los últimos dos partidos que quedan para que finalice la temporada, ante el Granada en el Benito Villamarín y en el Santiago Bernabéu frente al Real Madrid. Eso sí, los de Manuel Pellegrini necesitan que su eterno rival ni siquiera puntúe ante el Atlético de Madrid y el Athletic Club. Un punto de los de Julen Lopetegui en cualquiera de los dos partidos ya pondrá la Champions imposible para los verdiblancos.
Es por ello que entre el beticismo se está hablando mucho de lo que ocurrió en el año 2005. El Betis se clasificó para jugar la Liga de Campeones por primera vez en su historia quitándole precisamente la cuarta plaza al Sevilla. Pero en esta ocasión, a diferencia de aquella temporada, aún lo tienen los verdiblancos más complicado. Porque ahora son cinco puntos de diferencia en favor de los nervionenses, que además tienen la diferencia de goles a su favor por haber ganado los dos derbis ligueros (0-2 en Heliópolis y 1-2 en el Sánchez-Pizjuán). Pero en aquella ocasión el Betis se encontraba a un punto de los nervionenses, con la diferencia de goles particular empatada (2-1 en Nervión y 1-0 en Heliópolis).
El final de aquella temporada fue mucho más apretado. Tras la disputa de la jornada 35ª, en la que el Betis le ganó al Sevilla, gracias a aquel recordado gol de Ricardo Oliveira, el equipo dirigido entonces por Lorenzo Serra Ferrer se colocó a tres puntos de los sevillistas, 58 por 55. En la siguiente jornada, doble duelo sevillano-madrileño en el que el Sevilla empató a dos contra el Madrid en el Sánchez-Pizjuán y el Betis ganó en el Calderón, 1 a 2. La diferencia se recortaba a un punto. Fue en la siguiente fecha del calendario, la 37ª y antepenúltima, cuando se produjo el vuelco en la tabla. El Betis, en una recta final espectacular, doblegó al Zaragoza por 3 a 2, mientras que el Sevilla 'sólo' empató en Getafe (0-0). Así que a la última jornada llegaba el Betis por delante, con 61 puntos, por 60 del Sevilla. Fue en Mallorca, tras el 1-1, con aquel tanto de Assunçao, y tras la derrota sevillista por 0-2 en el Sánchez-Pizjuán, cuando se concretó el asalto final del conjunto verdiblanco a los puestos que dan derecho a jugar la máxima competición europea la siguiente temporada. Como así ocurrió.
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