Jorge Molina, de hincha bético en la Cartuja a jugarse la vida con el Granada en Heliópolis

Rubén Castro no pudo acudir, ya que tenía compromiso con el Cartagena, el club donde actualmente sigue marcando goles, en LaLiga Smartbank de Segunda división precisamente ese mismo día, sólo unas horas antes. Así que no le dio tiempo a desplazarse hasta la capital hispalense. Sí lo hizo, con el pertinente permiso del Granada, un Jorge Molina que vivió el partido en una zona en la que se juntaron varios exjugadores del conjunto verdiblanco, entre ellos la mayoría de campeones del 2005 que acudieron a la Cartuja. Aquella noche, Jorge Molina vibró como un hincha más y celebró el título conseguido por el Real Betis.

Pero mañana será muy diferente. Veintidós días después, Jorge Molina volverá al Benito Villamarín con el conjunto granadinista en una situación bastante distinta, con la tensión y los nervios correspondientes al hecho de que el equipo ahora dirigido por Aitor Karanka saltará al terreno de juego de Heliópolis jugándose la vida para lograr la permanencia una temporada más en Primera división. A los rojiblancos les hacen falta dos puntos respecto al Mallorca, el equipo que marca la frontera con el descenso a Segunda, para confirmar matemáticamente la salvación. Es decir, un punto contra el Betis y otro ante el Espanyol, que ya no se juega nada, en la última jornada. O ganar alguno de los dos partidos. El resto de combinaciones ya les haría estar pendiente de los resultados del Cádiz o el propio Mallorca.