La defensa ayuda pero no siempre gana (67-71)

El primer tiempo, con la curva de rendimiento verdiblanca en claro ascenso en el tramo final del segundo cuarto, dejó una lectura que es también una enseñanza: con sacrificio colectivo, como el que se ha impuesto de credo el conjunto de Casimiro a raíz de la marcha de Evans, también se puede competir ante un peso pesado como el Joventut sin meter los triples. Cuando tocó la campana del segundo cuarto y los jugadores se dirigían a vestuarios, la estadística reflejaba una paupérrima serie del Betis en el tiro exterior: dos aciertos de 16 intentos. Y sin embargo, ganaba por uno (32-31). Para llegar hasta ahí tocó sufrir, remar y picar piedra sin descuidarse en defensa cuando el aro verdinegro se cerró completamente. No se tragaba ni un lanzamiento del Betis, ya fuera bien o mal seleccionado.

Cuando anotó en dos transiciones y se puso cuatro arriba (11-7), Carles Durán movió el banquillo del Joventut y le dio el primer giro de guion a la velada. Para dentro, Tomic y Ribas, que aliados conforman una sociedad demoledora. Se confabularon para frenar en seco al Betis anestesiándolo con un parcial de 0-12 que cambió radicalmente el escenario. El Betis no se sentía nada cómodo. No había claridad en las lecturas ofensivas ante un Joventut que colapsaba la pintura. Tyson Pérez jugaba muy lejos del aro, Gerun no hacía daño y en el triple estaban los de Casimiro completamente desenfocados. Cegados. Pese a todo, caían sólo por cuatro tras el primer acto (15-19) . Mas como la dinámica no varió, el Joventut no tardó en poner tierra de por medio aunque tampoco brillase en el tiro.

No fue hasta el 19-28, tras triple de Vives, cuando el Betis Baloncesto halló caminos hasta entonces vetados. Pepe Pozas, magistral en cuatro jugadas, echó abajo los cortafuegos para incendiar la pintura verdinegra. Asistió para un triple de Almazán, se inventó una canasta a tabla y luego encontró dos veces a Gerun en la cabecera de la bombilla. Parcial de 11-3 que se alargó hasta el 15-3 (32-28) tras otros dos aciertos de Tyson Pérez y Gerun . Al intermedio, los verdiblancos mandaban en un partido parejo, igualaban en rebotes (23 a 23) y habían generado más puntos que su rival en la pintura (16/10) y en contraataques (8/2). Motivos para soñar siempre y cuando el equipo siguiera trabajando con la misma intensidad y sentido colectivo en defensa. Afinar en el triple se antojaba también imprescindible.

El Joventut salió del atolladero en la apertura del tercer cuarto, que tiñó de verdinegro con un 0-8 (32-39) que colocaba de nuevo a la tropa de Casimiro en el retrovisor de la Penya. El ataque se obturó y Guy, en su primer triple del partido, ampliaba a diez (32-42) . Tres minutos le costó anotar al Betis, que se aplicó otra vez en defensa y le lanzó gañafones a la Penya en la transición. Así sumó seis puntos para conectarse de nuevo al partido al tiempo que se encendía el público (42-44), con Tyson Pérez y Gerun agigantándose . Ahí, con el marcador apretado, Gray reclamó una falta en una penetración y en el siguiente lance se le señaló una antideportiva muy rigurosa a Gerun, revisión del vídeo mediante, sobre Guy. De ese episodio sacó el Joventut toda la tajada posible (42-48), pero el Betis no decayó. Siempre vuelve.

Montero le daba mucha energía al perímetro, Maronka la clavaba de tres (47-48) y Guy, ipso facto, se llevó una antideportiva más una técnica, por protestar, que lo eliminaba del partido. El americano, hecho un basilisco, dejaba a la Penya con un recurso menos para el perímetro. Montero canjeaba el doble regalo desde el 4.60: tres de tres (50-48) . Maronka, otra vez con un triple, demostraba que no hay peor cuña que la de la misma madera (53-51) en un tercer cuarto de múltiples alternativas y máxima tensión que acabó con el combate nulo, igualado (53-53). A esas alturas, promediaba el Betis un 19 por ciento en el triple que contrarrestaba con el 51 en el lanzamiento de dos. La defensa seguía siendo la clave.

El casillero de Gray, por cierto, seguía a cero después de siete tiros y ese déficit de puntos de los bases sí que pesaba a esas alturas del metraje. Calcando el regreso de vestuarios, el Joventut le endilgó un 0-4 de salida (53-57) que Casimiro cortó de raíz con un tiempo muerto. Pozas, Cvetkovic, Almazán, Tyson y Gerun a la pista . Quinteto nuevo como respuesta al órdago del Joventut, que se hormigonaba en defensa. Tampoco blandeaba el Betis (58-61), pero en ataque nada fluía. Cinco puntos en siete minutos era un pírrico bagaje.

Casimiro recuperó la carta de Montero y el dominicano respondió con dos puntos y una falta en ataque forzada (61-63). Durán envidó entonces con Birgander y Tomic, dos cincos, para asegurar el rebote cuando ya cada detalle, cada error y cada acierto, importaban. A falta de dos minutos, 61-65 y personal en ataque de Montero tras fallar una penetración (61-67). El Joventut no paraba de visitar la línea mientras Montero agarraba el timón anotando y alimentando a Gerun (67-70 con 35 segundos en el reloj). Se la jugó a defender el Betis y le salió bien, con un tapón de Gerun que dio la última posesión al conjunto verdiblanco. Nueve segundos para un movimiento en el tablero que llevara a las tablas... y a la prórroga. Bertans erró el triple, Tyson Pérez agarró el rechace y Montero pisó la línea de fuera de banda en la segunda tentativa . Restaban cinco segundos y, pese al intento de robo de balón del Betis, el Joventut se aseguró la enésima visita al tiro libre y cerró el partido el dominicano Feliz, clave con sus 17 puntos para que su equipo se fuera de Sevilla a la Copa con una sonrisa.

Ficha técnica:

Real Betis Baloncesto (15+17+21+22): Pozas (2), Bertans (4), B. J. Johnson (8), Tyson Pérez (15), Gerun (14) -quinteto inicial-; Maronka (8), Cvetkovic (3), Gray (-), Tsalmpouris (-), Montero (10), Almazán (3), Sylla (-).

Joventut (19+12+22+18): Vives (10), Guy (5), Parra (4), Brodziansky (7), Birgander (6) -quinteto inicial-; Kraag (-), Busquets (-), Ribas (5), Ellenson (5), Allen (-), Feliz (17), Tomic (12).

Árbitros: Cortés, Oyón, Fernández. Descalificado Guy con una antideportiva y una técnica (m. 28). Vigésima jornada de la Liga Endesa. Palacio de los Deportes San Pablo, ante 5.537 espectadores. Antes del partido se guardó un minuto de silencio por las víctimas del terremoto en Turquía y Siria.