La reunión con Pellegrini y la estructura de la plantilla

Los responsables de la entidad y de la parcela deportiva evaluaron uno por uno los futbolistas actuales y las necesidades por puestos así como la disponibilidad económica para reforzar al equipo. Las estrategias están marcadas y se apuntan a varios frentes pero la guía principal es que la composición del equipo en manos de Pellegrini sea bastante parecida, con retoques de calidad, a la de la temporada recién finalizada. Los pilares están asentados y se buscarán incorporaciones concretas como las ya citadas del central brasileño Luiz Felipe y su compatriota el extremo Luiz Henrique, que cubren las fichas que dejan Joel Robles y Cristian Tello.

Reestructuró el Betis su límite de gasto con las renovaciones y buscó aliviar el peso de los salarios más altos del grupo, por una parte, y Pellegrini ha insistido en que una de las cuestiones más importantes que ha logrado en estos años es el ambiente sano de competitividad en el vestuario, con lo que no quiere revoluciones que le supongan rehacer un edificio ya construido. Eso sí, exige el técnico calidad y determinación en las incorporaciones, que sean de contraste suficiente para que aporten desde el primer día y que los objetivos marcados estén marcados por ese escalón superior al que debe aspirar la entidad verdiblanca: entrar en puestos de Liga de Campeones.

Está claro que los movimientos que haya en el Betis sobre entradas van a depender, sobre todo, de las salidas. No por su volumen, sino por los ingresos que puedan generar. El mercado señala a Guido Rodríguez, Álex Moreno o William Carvalho como opciones viables para que el club verdiblanco haga caja, como pretenden todos los equipos, aprovechando su buen año con el quinto puesto y el título de Copa del Rey, y Diego Lainez está apuntado también como cesión viable por su falta de minutos y por los clubes que le pretenden. La entidad de alguna de estas salidas (todas no se van a concretar), es decir, el ingreso que generen marcará la disponibilidad para reestructurar el puesto que dejen y alguno más pero no existe la intención de revolucionar la composición de un equipo que ha funcionado a la perfección dos cursos consecutivos y que se sabe de memoria la dinámica de Pellegrini.

Las salidas generarán ingresos y dejarán huecos a tapar así como facilitarán que se acometan otras inversiones. El Betis quiere rejuvenecer el plantel y ampliar la nómina de futbolistas que tengan mercado de futuro, que puedan atender a una revalorización ya que es una de las cuestiones que le dará mayor margen en próximos mercados. Con la perspectiva de crecimiento deportivo es un punto fundamental en los siguientes pasos del Betis.

En ese sentido también cabe el concepto de la continuidad de Camarasa o el deseo de seguir contando con Bellerín. No así con Tello y Joel Robles sobre todo por el notable salario que tenían ambos, con interés de otros clubes en contar con sus servicios. Ahora le resta a la dirección deportiva seguir los tiempos que dicta el mercado en cuanto a posibles ventas y así transitar por los caminos ya trazados para hacer de la plantilla del Betis el grupo competitivo que Pellegrini quiere tener a sus órdenes en este curso con tantas expectativas.