El Betis define con su plantilla el acuerdo de reestructuración salarial

Los jugadores béticos y el club han mantenido un diálogo calificado como "cordial" en este tiempo de negociación, que se ha prolongado por varias semanas y que no ha afectado en ningún momento a la dinámica del equipo, que ha registrado sus mejores resultados de los últimos tiempos. Los futbolistas han entendido el contexto económico en el que se mueve el club y su papel en este sentido para aceptar que sus salarios se vean reducidos este curso y que puedan ser compensados en campañas futuras en diferentes opciones. Para esta negociación la plantilla se puso en manos de un abogado laboralista que, con las indicaciones dadas por los futbolistas, ha representado al grupo para dialogar con el club verdiblanco hasta alcanzar este acuerdo base. Ángel Haro , presidente bético, y José Miguel López Catalán , vicepresidente, han estado llevando las negociaciones con los pesos pesados del plantel junto a Antonio Cordón , director general deportivo, y finalmente el acuerdo se ha cerrado en fechas recientes.

Y es que ahora lo que le resta a la entidad es sentarse uno a uno con los jugadores y sus agentes para, dentro de este pacto general, ir ajustando las situaciones individuales en función de sus salarios, años de contrato, ofertas, etc. Un caso parecido al que han ido protagonizando en el Athletic y el Barcelona, por ejemplo, la mayor parte de sus profesionales durante este curso, con renovaciones, redistribución de salarios, etc.

La plantilla ya alcanzó la pasada temporada, en pleno confinamiento, un acuerdo con el club para la rebaja salarial (cuantificada en más de tres millones de euros) de cara a evitar un ERTE en el club y proteger así los emolumentos y puestos del resto de empleados, pero la situación no ha mejorado principalmente por la ausencia de público en los estadios y lo estancado de los mercados de fichajes, con lo que desde el Villamarín se ha tenido que articular esta medida de cara a reducir el impacto general de esta crisis en sus arcas y acercarse a cumplir el límite impuesto por LaLiga, que ha marcado en 66,2 millones de euros, muy lejos de los 100,3 del pasado curso prácticamente con la misma plantilla.

La reasignación, de la que ninguna de las partes ha ofrecido datos concretos en forma de porcentajes pero que sí reconocen que es destacada, es un paso importante para la entidad y también muestra el entendimiento con los jugadores, muy comprometidos con la situación de la entidad y que están apostando fuerte por entrar en Europa para cumplir no sólo el objetivo sino para que el club pueda tener una mejor perspectiva económica.

Hasta Manuel Pellegrini fue cuestionado en su día sobre este diálogo con la plantilla para el nuevo reajuste salarial y dio una versión optimista, como así se ha confirmado. "Este tema de las conversaciones entre ellos son conversaciones normales que pueden tener muchos clubes en este momento del Covid-19. Conversaciones que hasta el momento han sido muy amigables, esperamos que no tengan mayor trascendencia", señalaba en la previa del duelo ante el Cádiz.

Incluso el propio Ángel Haro , presidente verdiblanco, se ha referido en más de una ocasión a esta negociación. "He tenido un par de reuniones con ellos. El año pasado la rebaja fue del dos y medio y evitamos un ERTE. Estamos negociando con ellos, creo que la predisposición es buena. Ellos saben perfectamente la situación que hay, son conscientes y creo que van a ayudar. Tenemos una bajada importante por ingresos de taquillas", manifestaba a principios de este mes de marzo.

De esta forma, el resto de operaciones que estaban aplazadas a la espera de la resolución de esta negociación con la plantilla ya tienen luz verde para continuar su proceso siempre respetando este marco general con el grupo verdiblanco. Se trata de un acuerdo clave para la economía y para la buena relación entre los jugadores y la entidad. El compromiso de la plantilla se ha demostrado tanto en el pacto del pasado curso como en el actual sin que esto influya negativamente, sino todo lo contrario, en el rendimiento deportivo de un conjunto que está sexto empatado con el quinto y que mira con ambición el objetivo europeo.