Ni supo ganar ni le dejaron (2-2)

No estuvo brillante el Betis, no, pero también hay que hablar de Iglesias Villanueva. Muy permisivo ante las faltas que recibían los béticos, sobre todo Fekir, y que miró para otro lado cuando Álex Suárez despejó con la mano, pegada al cuerpo en una parte pero suelta desde el codo, un disparo del francés que iba a portería. De Burgos le avisó desde el VAR y viéndolo en el monitor no pitó lo que parecía evidente. El penalti, ya con 2-2, podría haber cambiado el signo del encuentro. Sin embargo, no lo pitó y el Betis se marchó lamentándose de esta acción. De nuevo los árbitros intervienen. Tampoco señaló roja a Coco por un plantillazo a Ayoze como último hombre. Señaló falta en la frontal y amarilla pero la acción era para algo más. El Betis tuvo motivos serios de queja.

No es una excusa porque en esta fase de la temporada todo se ajusta tanto que cada centímetro es un mundo. Es cierto que al Betis le costó entrar en el partido, que no supo mantener sus ventajas y que no está para ganar con brillantez ni siquiera a un equipo que llevaba nueve derrotas consecutivas. Llega con lo justo el grupo verdiblanco a estas curvas de la campaña pero también con la pegada de Ayoze, que no es poco. Y el punto ya se evaluará si es bueno o peor.

La primera parte tiene demasiados giros en el guion. El partido estaba para que el Betis lo encarrilara ante un rival en caída libre pero sólo vio complicaciones. Pellegrini entró en el campo con novedades porque las rotaciones son las que han de llevar a este equipo al objetivo dado que el domingo hay otro partido fundamental. Son menos de las que había planificado pero suficientes para ver el refresco en los laterales y a Marc Roca y Abde de nuevo como elegidos. Sin embargo, quien muestra más hambre desde el pitido inicial de Iglesias Villanueva es Las Palmas, que muerde por cada balón porque la victoria del Cádiz le obliga a pensar en su permanencia, comprometida cuando se daba por garantizada.

El choque se mueve entre la ida y la vuelta con un movimiento espectacular de Ayoze que salva Mika Mármol cuando era gol y con un disparo previo de Munir ante Rui Silva aprovechando un error conjunto de Aitor y Sokratis. La actuación del lateral fue muy deficiente, superado en todo momento por Sandro, amonestado pronto y jugando en el alambre constantemente hasta que fue sustituido en el descanso. Antes, en el minuto 20 tuvo que salir del campo por lesión muscular Guido y saltó Johnny Cardoso. Una pieza clave que se despide.

Se encuentra el Betis con el gol gracias a una jugada en la que intervienen de manera decisiva Abde, primero, y Abner, después. El centro del brasileño lo despeja a su meta Mika Mármol y así se sella el 0-1. Es la mejor aportación de Abner en su corta y camino de ser finiquitada trayectoria como bético. Pero la alegría bética no iba a significar una bajada de brazos amarilla sino que la reacción fue inmediata. Una falta concedida por Aitor a Sandro acaba en un centro lateral, un disparo desde la frontal y el rechace de Rui Silva lo anota Álex Suárez desde cerca con media defensa pidiendo un fuera de juego que no era.

Y el 1-1 inaugura una fase en la que al Betis se le junta todo lo malo. No sólo el tanto en contra y la pérdida del control del juego, sino que Isco también pide el cambio tras una acción en la que Coco va a golpear el balón y le da al malagueño. Ni falta pitó Iglesias Villanueva. Entró Fekir. Sin Guido ni Isco, el Betis está desbaratado y pidiendo el intermedio como el comer viendo que Aitor anda superado por Sandro y que el resto de compañeros no pasan del centro del campo con el balón controlado, echando de menos la aportación de Marc Roca o Fornals, intrascendentes en la primera mitad.

Se ve a un Betis mucho más propositivo en el inicio de la segunda mitad, pisa campo rival con la alegría de Bellerín por la derecha y con Ayoze generando inquietud arriba, más Abde eléctrico. La mejoría también llega por el incremento en la presencia de Fekir en la gestión con balón. Y se firma el 1-2 con un centro de Abner y remate de Ayoze con la cadera o con sus partes. Gol, en definitiva. Está el canario en racha pero lo noticioso es que el brasileño ha intervenido en los dos tantos. Al fin da rendimiento.

Iglesias Villanueva iba a tener trascendencia porque pasó de una falta clarísima de Mika a Fekir por agarrón continuado y permitía un contragolpe local. Enrabietado, el francés del Betis trabajó con denuedo posteriormente para frenar una acción de Munir y Abner también salvó atrás ante el marroquí. Sin embargo, la tranquilidad no iba a durar para el Betis, dado que Loiodice le hace un ovillo a Cardoso y su pase filtrado lo remata a gol Moleiro ante la pasiva salida de Rui Silva. El 2-2 pone al duelo en una situación extraña, con el Betis queriendo y con Las Palmas dando por bueno el marcador pero presionando fuerte.

Ayoze completa un magnífico control orientado y la falta de Coco en la frontal es para que Fekir intente el disparo directo. Lo hace y Valles despeja al centro. Antes de que la pelota llegara al meta rinconero da en la mano de Álex Suárez. De Burgos Bengoetxea avisa desde el VAR al árbitro de campo, que va al monitor y decide que no hay nada. La mano existía pero esta vez decidió Iglesias que no era penalti. El criterio cambiante como siempre. Y extraño en estas jornadas con tanto en juego.

El partido es un ejercicio de voluntad del Betis constante pero con menos acierto del que necesita. Es Rodri quien revoluciona el partido y hace el doble o el triple del intrascendente Fornals. El extremeño protagoniza dos jugadas con desborde. La primera es un centro con la derecha que deja en gran situación a Abde, quien recorta a Álex Suárez y pierde la pelota cuando tenía que haber disparado. La segunda son dos quiebros de Rodri en su banda y un chut que acaba en córner. Pero la mejor oportunidad fue para Abde, quien en un contragolpe se quedó solo ante Valles después de un pase ajustado de Ayoze pero el meta del equipo canario despejó de forma apurada para sostener el 2-2. Luego Pejiño tiene el 3-2 pero lanza fuera tras un desajuste atrás y ahí se acaba el partido. No gana el Betis y logra un punto que será mejor o peor en función de lo que haga la Real Sociedad.