El Everest ha seguido siendo el Everest después del estallido de la pandemia y también después de los atascos que en 2019 provocaron varias muertes por encima de los 8.000 metros . No han servido de nada las nuevas normas -más para la galería que otra cosa- impuestas por el gobierno de Nepal.
De hecho, se ha batido el récord de permisos y, a falta de recuento oficial , también habrá habido récord de cumbres en esta primavera de 2021. Así, han continuado los atascos, convirtiendo la ruta típica hacia la cumbre en un reguero de clientes en busca de pisar sobre los 8.848 metros .
Así lo atestigua la imagen que preside este artículo, tomada por Mimgma Dorchi Sherpa hace unos días mientras contribuía al ascenso de varios de esos clientes de la agencia ' Pioneer Adventure '. Una de las muchas que han hecho negocio este año a pesar de los problemas con el coronavirus en el campo base.
Responsables de las agencias aseguran que la realidad en esa pequeña ciudad a los pies del coloso del Himalaya ha sido muy diferente. Hubo contagios, pero nada grave, aseguran . Tratando de quitar hierro a una situación que ha obligado a evacuar a muchos clientes y que ha derivado en una crisis sanitaria muy complicada en el país.
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