GOLF | BMW PGA CHAMPIONSHIP
El Circuito Europeo celebra el 60 aniversario de su torneo bandera
Wentworth se engalana para recibir a los mejores jugadores en el torneo más importante del continente, aparte del «British»
El Circuito Europeo celebra el 60 aniversario de su torneo bandera
Al margen del Open Británico, el torneo más apetecido por los jugadores del Circuito Europeo es el BMW PGA de Wentworth. Se trata del que organiza su propia asociación, se desarrolla en un entorno impresionante y el ambiente que se respira en él es ... de tradición y respeto por todas partes. Cumple 60 años de vida y las celebraciones se suceden.
En un principio, el torneo lo organizó la PGA Británica pero, como sucedió con la Ryder Cup, después pasó a depender de la PGA Europea. Aunque fue rotando por diversos clubes, desde 1984 se juega en el West Course de Wentworth, uno de los recorridos más prestigiosos del mundo en el que han dejado su nombre impreso algunos de los mejores ganadores que se puedan imaginar: Seve Ballesteros, Nick Faldo, Colin Montgomerie, Bernhard Langer, Ian Woosnam, Chema Olazábal, Miguel Ángel Jiménez... Precisamente estos dos últimos son el centro de las miradas en esta edición, pues son los más veteranos de los 150 participantes: el vasco ha estado previamente en 25 ediciones y el andaluz, en 24.
Prueba de la importancia de esta convocatoria es que entre los hombres que buscarán el título el domingo se encuentran diez ganadores de «majors», diez números uno europeos, veintiséis jugadores de la Ryder Cup, 99 ganadores de torneos del European Tour y ocho de los torneos patrocinados por BMW. Precisamente esta circusntacia se está valorando mucho esta semana, pues a los diez años de patrocinio de la firma automovilística en este evento especial se van a sumar otros cuatro, hasta 2018. «Estamos muy orgullosos de esta ampliación, pues BMW se ha convertido en uno de nuestros más valiosos colaboradores, no sólo por lo que nos aportan, sino también por su forma de hacer las cosas y de ver el deporte» declaró orgulloso el máximo rector del ET, George O'Grady.
Los españoles, con muchas ganas
Al margen de los actos institucionales, en el plano competitivo hay una participación de lujo. Salvo Graeme McDowell y Gonzalo Fernández Castaño, el resto de los emigrantes al PGA Tour están presentes: Ernie Els, Henrik Stenson, Rory McIlroy, Justin Rose, Sergio García, Charl Schwartzel, Luke Donald, Lee Westwood, Victor Dubuisson... De ahí que todo el mundo esté expectante ante lo que pueda suceder esta semana. «A ver qué nos depara el destino» contestó divertido Jiménez a la pregunta de si pensaba repetir victoria en su tercer torneo consecutivo, después de las logradas en el Champions Tour y en el Open de España . «Hay muchos puntos del ranking mundial en disputa y es un buen momento para seguir consolidando el juego como hasta ahora» reconocía un Álvaro Quirós cada vez más en forma. Eduardo de la Riva también está con ganas, pues «éste en un campo exigente que siempre apetece jugar; estoy muy contento de estar aquí». Por su parte, Alejandro Cañizares era todo optimismo después de su cuarto top-10 del año el pasado domingo en Gerona. «Vengo con muchas ganas, porque este torneo siempre se me ha dado muy bien; el año pasado fui líder la última jornada y espero poder repetir la actuación.»
Ahora bien, si los veteranos están curtidos y ven la semana con esperanza, las caras de dos de los debutantes hablaban por si mismas. Nacho Elvira y Adrián Otaegui andaban por la cancha de prácticas como niños con zapatos nuevos. «Estar rodeado de estos jugadorazos y en este campo es una maravilla -apuntaba el cántabro. De momento lo llevo bien, pero seguro que cuando salga
a jugar el jueves notaré algo muy especial.» En el caso del de Goiburu, además, cuenta con la ventaja de tener a un maestro de excepción que le está desentrañando los secretos de Wentworth. «Llevo dos días entrenándome con Olazábal y ya me va diciendo cómo jugar cada hoyo. Es un campo en el que hay que estar siempre muy concentrado y quiero llevarlo muy estudiado para poder salir a atacar desde el principio.»
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