Los torneos amateurs resisten la crisis y sobreviven a base de ofrecer más calidad

Ver a más de mil aficionados en la jornada inaugural del Circuito Audi-Canal Plus fue toda una premonición. «Los amateurs están ávidos de competir y que no les importe viajar hasta La Manga Club para estar con nosotros demuestra el amor que sienten por nuestro deporte» reconoce Hugo Costa, máximo responsable del único canal de golf especializado de España e impulsor del tour en el que compiten sus abonados. Las difíciles circunstancias del pasado reciente, con cierre de campos y reducción de licencias, hacían difícil pensar en una recuperación como la que se está produciendo. «El mercado se ha ajustado _comenta Alicia Garrido, organizadora del BMW Amateur _ pues hemos tenido años de 28 pruebas y ahora ofrecemos diez, pero la gente es muy fiel y sigue participando igual. Afortunadamente, nosotros no hemos notado un descenso de jugadores en las quince ediciones que llevamos celebradas y seguimos llenando en todos los torneos».

La dinámica de los circuitos comerciales suele ser la siguiente: un cliente contrata a un promotor que, a su vez, alquila un campo para celebrarlo. Los jugadores pueden ser socios del club (torneo social) o no (abierto). «Hemos notado un descenso del 50% en las reservas _confirma el director del Club de Campo Villa de Madrid , José María Roncallo_ y al haber menos torneos también hay mayor selección por los jugadores. Es importante que tengan unos buenos obsequios para que se apunten». Jorge Piera, organizador del Gambito , comparte esta opinión, pues considera que «a la hora de decidirse por jugar en un sitio u otro influye el servicio que reciben, los regalos de bienvenida, las carpas de comida y los premios. Además por supuesto de la calidad de los recorridos».

Una de las ventajas de los circuitos es que permite a los federados ir de un campo a otro por precios razonables. «Para mí el mayor atractivo es jugar en lugares que no conozco _afirma Francisco de la Cuadra, hándicap bajo sin club_ y poder hacerlo por unos 40 € es muy atractivo». Sin embargo, para David García, socio de la Real Sociedad Hípica , «la cuestión del precio depende mucho de si el jugador es socio de un club o no, puesto que él puede jugar por muy poco dinero en su campo y jugar otros torneos le sale relativamente más caro. También influye si son benéficos o no».

Con la primavera, el panorama se presenta optimista para jugadores y organizadores. No sólo en cuanto a circuitos sino también a torneos exclusivos, como la Salme's Cup , que por sexto año consecutivo reúne desde ayer a los golfistas más famosos en Tenerife sin bajar un ápice en su calidad: Juan Carlos Ferrero, Bernd Schuster, Pepe Reina o Juan Antonio Corbalán son testigos de ello. Por eso, Garrido se atreve a pronosticar que «se volverá a lo que vivimos en años anteriores, aunque sin tantos excesos en los repartos de premios (sorteos de viajes, televisiones, etc.); pero el mundo del golf amateur tiene mucho recorrido todavía».