golf
Al Masters le duele la espalda
Con Tiger Woods ausente y Phil Mickelson dudoso, el primer grande de la temporada llega tocado por las lesiones
miguel ángel barbero
El ambiente en Sotogrande vuelve a ser el de los grandes momentos. La celebración del NH Collection Open en La Reserva ha vuelto a traer un torneo internacional a la zona, tan necesitada de golf de alto nivel que vender a través de las ... televisiones de todo el mundo. Sin embargo, el comentario generalizado iba más allá de que quince españoles aspiran a ampliar la racha de triunfos hasta unos impensables cinco títulos a estas alturas del año. Las lesiones lumbares de Tiger Woods y Phil Mickelson se han convertido en todo un dolor de cabeza para los aficionados.
Entre ambos suman siete chaquetas verdes y no tenerles en acción en Augusta el próximo jueves puede ser un golpe muy duro. «Va a ser diferente afrontar este grande sin ellos -declaró desde Houston Matt Kuchar, número 11 del mundo-, pero el Masters es lo suficientemente importante para que no se note su ausencia. Por otras ocasiones en las que ha faltado, sabemos que aunque la presión mediática es menor la deportiva no se resiente tanto y abre la victoria a otros jugadores». La ausencia del primero del ranking es segura después de su paso por el quirófano, y su recuperación total, una incógnita. «Yo he tratado a varios golfistas de élite, como Seve Ballesteros o Chema Olazábal», afirma el doctor Alfonso del Corral, «y he podido constatar que sus espaldas sufren mucho. Es uno de los deportes más duros porque los movimientos de torsión y golpeo son constantes. En el caso de Tiger le han liberado la raíz del nervio para buscar una cura a corto plazo, pero me temo que el problema de base va a seguir. La estructura de la columna se debilita y es frecuente que vuelva el dolor».
La actuación de Phil Mickelson, por su parte, es incierta. Una contractura le hizo retirarse de Texas el fin de semana pasado, no acudió a su ronda de entrenamiento del martes en Augusta y se borró ayer del pro-am en Houston . Así que es seria duda en este momento. «La zona lumbar es el eslabón más débil de los golfistas -comenta Álvaro Zerolo, fisioterapeuta del Circuito Europeo- y tarde o temprano casi todos terminan padeciendo dolores en algún momento de la temporada, y todos, sin excepción, a lo largo de su carrera». «No solo es por el juego -indica Adrián Otaegui, debutante en el Tour-, pues los jóvenes nos cuidamos mucho y fortalecemos la zona; tanto viaje y cambio de hoteles también la castiga mucho».
Por desgracia, los dos campeones no son los únicos doloridos. Si el australiano Jason Day (número 4) no soluciona los problemas de su mano, tres de los cinco primeros del planeta podrían quedarse fuera de concurso a las primeras de cambio.
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