El 'vuelva usted mañana' de los jóvenes con el bono cultural: «Está siendo una odisea»

El pasado 25 de julio se abrió el plazo para que los jóvenes españoles que alcanzaran la mayoría de edad en 2022 (es decir, los nacidos en 2004), pudieran solicitar el bono cultural joven, una ayuda de cuatrocientos euros para gastar en ocio y levantar los ánimos en año electoral. Al mismo tiempo empezó un bautismo laico, democrático, algo así: el descubrimiento de la vida adulta por parte de una generación entera, la introducción a la mejor tradición burocrática española. ¡Vuelva usted mañana!

Hay medio millón de jóvenes censados en España que pueden acceder a este bono, pero hasta ahora, según los datos del Ministerio de Cultura, solo se han contabilizado 200.000 solicitudes (no sabemos si exitosas o no, porque no precisan los datos). El plazo para registrarse finaliza el 15 de octubre. ¿Y qué pasa con la otra mitad de estos jóvenes? Bueno, aquí empieza la historia.

«Está siendo toda una odisea. La web se abrió el 25 julio, y ese día lo intenté. Me meto cada día y me encuentro innumerables fallos. Nunca he logrado llegar hasta el final», continúa Juanjo. Por el camino ha pedido el certificado digital y se ha dado de alta en el sistema Cl@ve a través de carta postal (la web estuvo saturada demasiadas mañanas). Espera conseguir su objetivo antes de que se agote el plazo. De su grupo de amigos solo una persona ha completado todos los pasos. «Sí, soy la única persona que conozco que ha conseguido pedir el bono», cuenta Diana, entre risas, al otro lado del teléfono. Hubo truco: «Me ayudó mi padre». Y lo hizo en Palencia.

En Twitter ya hay un subgénero humorístico con el asunto. «No sabía que hacían falta tres carreras y dos másteres para solicitar el bono cultural» (@alextiintor22). «Más fácil ha sido el bachillerato» (@juliabarroso_g). «Al final voy a conseguir antes los 400 euros trabajando que con el puto bono cultural joven» (@dec0lorada). «Ya he pedido el bono cultural, solo he tenido que matar al dragón del end, capturar un pokemon legendario, conquistar Gibraltar y encontrar la cura del cáncer» (@Dani_22_02). «¿Algún feo pero hacker que me ayude a sacar el bono cultural?» (@icoesp).

Sobre el papel, los requisitos son fáciles. Basta con tener certificado electrónico, DNI electrónico o estar dado de alta en Cl@ave. En la pantalla es otra cosa. «Conseguí registrarme en Cl@ve por videollamada. Pero cuando me metí en la web la estaban actualizando, y estuvo así cinco o seis días. Cuando se actualizó me volví a meter. Pedían también una aplicación que es la firma digital, que eso no supone ningún problema, es instalarte una app. El siguiente paso era introducir la Cl@ve: había tres opciones, una clave pin permanente, la temporal y otra más. Mis amigos y yo pinchamos o en la primera o en la segunda, pero introducías la contraseña que te enviaban al móvil y te salía un mensaje que ponía "vaya, algo salió mal". No daba ninguna opción de cerrar la ventana y cada vez que entraba salía ese mensaje. No he tenido manera de salir de ahí y he empezado la universidad, no puedo dedicarle tanto tiempo», relata Pablo. «Es ridículo que se tarde tanto tiempo en una gestión que en teoría es una ayuda».

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Elvira nos narra su peripecia, que empezó en julio. «He tenido que usar todas las opciones de registro. Fui a una oficina de la Agencia Tributaria a registrarme en Cl@ve. Me tuve que comprar un lector de tarjetas para leer el DNI electrónico en el ordenador… Son un montón de cosas que no puedes prever. Porque en ningún lugar se explica el procedimiento de manera clara. Yo usé un vídeo de Tik Tok que me envió una amiga donde explicaba paso a paso cómo hacerlo, pero aún no he conseguido registrarme. Tengo todo hecho, pero la página web no funciona, aparece en blanco… Parece que no nos lo quieren dar». También parece que no es lo mismo administración digital que nativo digital...

Por cierto: de momento nadie ha recibido la tarjeta monedero. Quien ha logrado superar la yincana ministerial tiene que esperar a que revisen su solicitud y cruzar los dedos para que la acepten. En agosto, Miquel Iceta prometió que los monederos empezarían a llegar «a lo largo de septiembre». Esto también es cultura. ¡Vuelva usted mañana!