Ginés Marín: «He podido volver a sentir los olés de Madrid»

Ventura, el último en cortar un rabo en este ruedo, habló así de su primera faena: «El toro ha tenido clase y se ha movido, que es lo importante. Los últimos tercios se ha parado un poco más, pero la verdad es que ha tenido cosas muy buenas. Lo que pasa es que siempre el abrir plaza cuesta mucho, siempre lo defiendo, porque la gente está fría, todavía no está metida en la corrida. Este toro si hubiera ido en otro lugar, la gente se habría calentado más, porque ha habido cosas interesantes. Una pena el pinchazo, porque si lo hubiera matado a la primera como lo hice a la segunda me habrían pedido la oreja. Ha sido una actuación muy correcta». Más contento se mostraba tras cortar la primera oreja de la tarde en el cuarto: «Feliz de esta faena rotunda nuevamente pinché por arriba, pero sí, muy contento»«.

Paco Ureña comentó que «ha sangrado mucho el toro y se ha venido abajo. Tenía buena pasta y buenas cosas, pero se ha desfondado. Tenía cosas bonitas, pero para esta plaza hace falta más». En el quinto, se mostró más resignado, y habló sobre la situación actual del campo. «No ha habido ninguna opción. Este toro humillaba, no tenía mala condición y era serio. Era bajo, pero abría la cara. Tenía humillación, pero no fondo ni fuelle. Una pena. No es el toro que se espera en una plaza como esta. También hay que entender que son años difíciles y que no hay toros en el campo. Indudablemente esta plaza, que es la primera del mundo, necesita un tipo de toro; pero tenemos que entender que es muy difícil encontrar toros en el campo ahora mismo. Venimos de una pandemia donde ha sido muy duro para todos. Si Dios quiere, será en la de Victorino».

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El extremeño Ginés Marín, en el que muchos aficionados tienen puesta grandes esperanzas, muchas veces ya convertidas en realidad, también habló a los micrófonos de la televisión. «Tenía buena condición pero se ha desfondado y muy parado. Para esta plaza este tipo de toros que no trasmite es imposible. El toro lo hacía bien en el capote, especialmente por el pitón izquierdo, pero se ha venido muy abajo».

Tras cortar una oreja al sexto de la tarde, Marín se mostraba feliz: «Le ha faltado fuerza, es lo que más ha demostrado en la muleta y tal vez por lo que no haya terminado de coger el vuelo que yo deseaba la faena, pero he disfrutado mucho y he podido volver a sentir los «olés» de Madrid. He intentado estar lo mejor posible con él, lo he disfrutado y creo que el publico lo ha sabido entender y valorar».

El padre de Ginés, Guillermo Marín, le acompaña tarde tras tarde en su cuadrilla, como picador. «El sexto era el toro que, a priori, menos nos gustaba, y al final ha tenido buenas cosas. Le ha faltado un poquito de fuerza para haber sido más boyante, pero creo que ha sido un buen toro y he felicitado al ganadero», expresó Guillermo. «El resto de la corrida ha sido más parada, pero éste ha sido un buen toro y Ginés le ha echado imaginación e inteligencia, creo yo. Lo del momento extraordinario es un tópico que se dice de los toreros, pero yo, que le veo en el campo y le conozco, le veo muy centrado y es una pena que no lo veamos en más ferias», dijo orgulloso el padre del torero.