«Hoy despedimos a Piconera, una potra de gran clase nacida y criada en casa. Cuando se disponían a encerrar al novillo 31 Escopetero, que estaba lastimado de una pezuña, este alcanzó a Piconera por la barriga echándole las tripas fuera sin que nada se pudiera hacer por su vida. Afortunadamente nuestro mayoral, Juan, pudo salir ileso de tan violento lance… Son cosas que pasan cuando se trabaja con toros bravos. ¡Piconera siempre en el recuerdo!», escribían esta mañana en el perfil oficial de la ganadería de La Palmosilla, con Javier Núñez al frente.
Son muchos los percances que suceden en el campo bravo, pues el manejo del toro bravo es imprevisible. El último ocurrió en la finca tarifeña de La Palmosilla, la divisa que estrenará este viernes 7 de julio las corridas de la Feria del Toro de Pamplona. Y lo hace con los laureles de los últimos sanfermines, cuando se coronó como la ganadería más completa. Arrumbadito, Remilgado, Memorable, Vinatero, Pueblerino y Sombrerito se llamaban. Todos embistieron. seis de seis. Con lo difícil que es.
La corrida de este viernes será lidiada por Rafaelillo, Manuel Escribano y Leo Valadez, idéntica terna a la de 2022, el año del reencuentro del más veterano con la afición pamplonica tras su durísima cogida con miuras.
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete