Cornada a Rafael González en el toro de su alternativa

Toma la alternativa el madrileño Rafael González (los mismos nombre y apellido del mítico Machaquito). Ha toreado bastantes novilladas . Sus mayores éxitos han llegado en Madrid (en total, lleva cinco orejas) y en Sevilla (salida por la Puerta Grande). La pandemia interrumpió su carrera . Brinda a su padre el toro de su alternativa, que se mueve, va a más. Aunque hace más de un año que no torea, se muestra firme y capaz, en un trasteo muy correcto. En las bernadinas finales, sufre la cornada. Se empeña en entrar a matar pero no está en condiciones: pincha una vez y se lo llevan a la enfermería. Pero ya es matador de toros. Mata bien Juan Leal , que se queda con tres toros más.

El francés logra éxitos con una valentía temeraria (algo muy respetable). Sorprende verlo, a sus 23 años , abrir cartel y ser padrino de una alternativa. Suele torear de rodillas y metido entre los pitones, como Ojeda. Mata con salto, encunándose, a topacarnero (se decía).

En el segundo, de rodillas, encadena derechazos. En corto, muy quieto, logra muletazos templados, junto a algunos enganchones y momentos apurados. Mata con su peculiar estilo: oreja .

El cuarto, Ibicenco, es un jabonero sucio. (Escucho un chiste malo: «Será un hippy»). El toro. reservón, pega arreones. (Añade el vecino: «Pero no reparte flores»). Juan Leal, impávido, traga mucho, hasta que llega la esperada voltereta. Repite el salto pero esta vez pincha.

Comienza en el sexto con dos cambiados. El toro es complicado: arrimón, sustos, enganchones… Surge la división. El valor es indiscutible. Mata con su estilo y le ovacionan.

El peruano Joaquín Galdós es hijo de un matador y ganadero. Lo quisieron presentar como rival de Roca Rey: está en otro escalón. Destaca por su estética. El tercero embiste templado, le permite correr a veces la mano con gusto pero el trasteo es irregular, no se redondea. En el quinto, saluda Roberto Blanco, con los palos. El toro embiste algo brusco, no se entrega. La voluntariosa faena no encuentra eco.

Las tan repetidas bernadinas han mostrado su riesgo. También hemos visto chicuelinas, cites de espaldas, cambiados, invertidos… La moda actual. ¡ Qué nostalgia de verónicas y naturales !

Posdata. Una novela reciente, 'El último torero', de Joaquín Pérez Ordóñez , nos sitúa en una España en la que se han prohibidos los toros: se ha creado una Brigada Antitaurina , hablar de toros supone apología del terrorismo, la Maestranza está en ruinas, se organizan festejos clandestinos para turistas… Advierte el autor: «Sucederá muy pronto. O tal vez esté sucediendo, ante nuestros ojos». La novela es muy interesante pero espero no ver nunca esa tristísima realidad.