Alejandro Talavante: «Lo que me parece interesante de poder ser torero es la no obediencia»

Eran las primeras palabras de la figura extremeña tras su retirada de los ruedos hace casi dos años. Su vuelta estaba prevista para el Domingo de Resurrección en Sevilla , pero la pandemia obligó a cancelar el cartel.

Talavante continúa en su retiro y por primera vez desde su última corrida en la Feria del Pilar de 2018 ha vuelto a torear para las cámaras de La 2 . Una esperadísima «reaparición».

«Volver será en su momento y lo único que tengo claro es que cuando ese momento llegue el primero en saberlo seré yo», subraya. «Considero que el toreo es un ejercicio de libertad , y la libertad nunca puede ir de la mano de la obediencia. Realmente lo que me parece interesante de poder ser torero es la no obediencia», continúa.

«Se trata de no pensar delante de la cara del toro, de confiar en las decisiones que el subconsciente toma en cada momento», añade a los micrófonos de Tendido Cero.

«El toreo es un ejemplo de cómo la razón se impone a la razón , la razón de huir a la razón del saber. Nunca hubo tiempos buenos para desarrollar una obra, y eso hace que el artista se convierte en un héroe, abre caminos diferentes», reflexiona el matador entre natural y natural.

«El toreo reúne gran parte de los valores universales de la humanidad, quién sabe si después de estos momentos, la humanidad se vuelva a reencontrar con estos valores», agrega.

Después de hacer el toreo con un toro de Adolfo Martín en la finca de Cayetano Muñoz, su apoderado, Joselito , le pregunta por cómo se ha sentido. «Hacía tiempo que me apetecía sentir esas embestidas, es algo diferente a lo que habitualmente venía viviendo», confiesa.

«Ese sentimiento es lo que percibimos desde fuera -comenta su mentor-; todo lo que sientes, lo sienten los demás. Conjuga la verdad y la pureza con la caricia, con momentos sublimes, no está al alcance de todo el mundo».

El bellísimo reportaje prosigue con un «¡qué bonita es Extremadura!» de Talavante, que en tierra pacense reflexiona más allá: «Más que tocar y atacar, dejo al toro elegir la muleta o el cuerpo». Remata Joselito: «Eso es la pureza».