Actitud de «Capea»; gusto de Rivera

El de San Mateo fue un encierro serio, bautizado en el orden y con idénticos nombres a los de la tarde inaugural de 1946. Curiosamente y como aquella vez, los triunfos se suscitaron con «Fresnillo» al que «Capea» le cortó una oreja (como lo hiciera «Manolete») y con «Gavioto» al que Rivera le cortó las dos (aquella tarde del 46, fue Luis Procuna el que consiguió una con un astado «tocayo» de éste). Fuera de las coincidencias, importante resultó el que «Capea» se haya echado todo el año aquí en México. Se mostró serio, firme, muy dispuesto y con pensamientos muy claros. Su concepto del toreo le permitió luchar con un animal que no terminó por entregarse y con el infame viento que sopló durante toda la faena. Sin embargo el mérito del hijo del querido «Niño de la Capea» quien al lado de su hija Verónica y su yerno Miguel Ángel Perera, disfrutaron de las actuación de su hijo.

Pedro ha conseguido este domingo, quizá la mejor de sus tardes en la monumental capitalina. Lo de Fermín Rivera dio gusto por muchos motivos. Engrosa la lista de mexicanos triunfadores en la campaña, pero sobre todo cuando un torero que casi no viste de luces, quién sabe por qué carambas, se acompla perfectamente a un toro no fácil que tenía nobleza, pero debilidad, y le hace una faena en la que creció muletazo a muletazo, es por algo. Los comentarios de los profesionales en la plaza y los que le vieron por televisión y lo externaron en las redes sociales fueron siempre de un convencimiento a la actitud y las cualidades de este torero potosino quien llevando la muleta a media altura y sabiendo templar, consiguió una faena que terminó siendo un compendio de buen gusto.

La estocada bien lograda le mereció el primer triunfo de dos orejas en la Monumental de Insurgentes que se mantendrá abierta, cuando menos, hasta principios de marzo. Pasó de puntillas como primer espada de la tarde el mexicano Cristian Ortega a quien le correspondieron dos toros complicados con los que salió del paso reluciendo su notoria falta de sitio y de visión, pues a la México no se puede llegar tan impreparado. El proximo domingo debutará el rejoneador Leonardo Hernández, alternando con Arturo Macías y Joselito Adame, con toros de De La Mora (rejones) y Lebrija (a pie). Y el 20 de enero, con toros de Fernando de la Mora para Julián López "El Juli" y Diego Silveti, mano a mano. Las corridas de Aniversario 67 de la Plaza México según informó el empresario Herrerías se darán los días 3 y 5 de febrero.