La electricidad seguía funcionando mientras se hundía el Titanic: desvelan nuevos detalles sobre el mito del naufragio

En 2022, la empresa Magellan sumergió una serie de escáneres a 3.800 metros de profundidad, y a unos 600 kilómetros al este de la costa de Terranova, en Canadá; precisamente, la ubicación del transatlántico. Su misión era la de crear un gemelo digital con tecnología en 3D a partir de unas 700.000 fotografías. No es que no existieran imágenes sobre el estado del barco, sino que ahora es posible visitar zonas recónditas desde un ordenador y en alta resolución.

Esta herramienta digital ha servido para desvelar algunas hitorias inéditas y también para cotejar los testimonios de algunos supervivientes. Uno de ellos ha dado lugar a varias escenas cinematográficas de gran impacto: el Titanic se hundió con las luces encendidas.

Gracias a la tecnología del gemelo digital se ha podido acceder a una de las salas de calderas que quedó descubierta por la fractura que dividió al buque tras chocar contra un iceberg. Y la conclusión que arroja un estudio realizado por National Geographic es fascinante. La observación de una válvula de vapor abierta parece confirmar que efectivamente, la electricidad continuaba funcionando incluso mientras la nave se sumergía por completo en las frías aguas del Atlántico Norte.

Parece ser que los empleados de las calderas trabajaron hasta el último momento para mantener la línea eléctrica, un heroico gesto que fue clave para muchos supervivientes, que pudieron acceder a los botes y salvar la vida. Ninguno de los técnicos sobrevivió al hundimiento.

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Otro de los hallazgos de la tecnología de cartografiado 3D ha sido la detección de un conjunto de enseres personales de lujo de un pasajero del barco. Sumergido a casi cuatro kilómetros se encuentra un colgante con un diente de megalodón (un tiburón prehistórico) decorado con incrustaciones de oro. Por un acuerdo entre Reino Unido y Estados Unidos, está prohibido retirar absolutamente ningún resto de los que yacen en el pecio del Titanic.

Estos hallazgos corren a cuenta del equipo de Stephen Parker, quien ha estudiado la copia digital del barco con detenimiento y lo cuenta en el documental 'Titanic: La Resurrección Digital', producido por National Geographic y Atlantic Productions.