Suscríbete a
ABC Cultural

Tesoros insólitos entre legajos: desde el colmillo de un príncipe a gelatinas de huesos para alimentar a soldados

El Archivo General de Simancas guarda una importante colección de muestras de tejidos de todo tipo y piezas de uniformes del siglo XVIII

Detalle de las muestras de gelatinas para alimento de soldados enviada por Proust en 1791 Archivo General de SImancas
Mónica Arrizabalaga

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Más de un siglo antes de que los cubitos de caldo Avecrem llegaran a España en plena Guerra Civil y se popularizaran en esos años de necesidad, un reputado químico francés, profesor del Real Colegio de Artillería de Segovia, presentó a las autoridades su 'Resultado ... de experiencias hechas sobre hallar medios de augmentar la subsistencia del soldado sin sobrecargar el Real Herario'. En este informe enviado el 22 de enero de 1791, Joseph Luis Proust (1754-1826) incluyó 36 muestras de gelatina elaboradas con huesos de vaca, carnero o cerdo. Tal vez las más antiguas pastillas de caldo que se conocen.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia