TEATRO
«Desclasificados»: el periodismo y la política suben a escena
La obra se estrena hoy en el Teatro Bellas Artes de Madrid con tres protagonistas «muy televisivos»
ELENA JORRETO
Un día Joaquín Climent se salvó de quedarse en tierra gracias a un policía del aeropuerto de Barajas que le hizo el pasaporte. «Porque eres del cuerpo», le dijo. La causa lo valía, y lo lo valió durante los ocho años en los que ... encarnó al agente Pascual Moreno en «El comisario» , una de las series más exitosas de la televisión en España. Con él se ganó el respeto de las fuerzas de seguridad, hasta el punto de que algunos policías todavía le recuerdan que «en todas las comisarías hay un Pascual».
El tiempo ha pasado, y Joaquín ya no es Pascual, sino un presidente de Gobierno frío, corrupto y calculador. El protagonista de «Desclasificados» , la obra de teatro que Climent estrena hoy junto a Jordi Rebellón y Alicia Borrachero en el Teatro Bellas Artes de Madrid. [ Compra tu entrada con descuento en Oferplán ] Ésta es la primera «oportunidad» que aprovecha el actor valenciano para poner fin a siete años de ausencia sobre las tablas. «Ante un texto de este calibre no puedo decir que no», cuenta Climent. Pero también le ha motivado el reparto. «Te ponen delante a Jordi y a Alicia en una función con personajes muy completos...», dice.
Alicia Borrachero apunta otro factor clave del éxito: un texto «brillante» del guionista y director teatral Pere Riera que, como sus actores, compagina la escritura de obras con la de guiones televisivos. La ex de «Periodistas» –la serie que le dio a conocer a principios de los noventa– retoma ahora el oficio. Pero atrás ha quedado el «potrillo desbocao» que representaba en Telecinco, tan «importante» en su trabajo y en su vida. Ahora se introduce en la piel de una periodista «top» que entrevista a un presidente del Gobierno «en un momento de crisis gravísima» debido a su presunta implicación en un delito aberrante .
Trabajadores de historias
Como Climent, Borrachero aceptó su papel por la compañía. «Estaban Jordi y Joaquín, y con el tiempo cada vez más elijo el trabajo por la gente con la que estoy», reconoce. Además, le apetecía hacer algo «más íntimo» que «Agosto» (Condado de Osange), con un abultado reparto protagonizado por Amparo Baró y Carmen M achi. Para ella, regresar al teatro –«el medio natural de un actor»– ha sido «un gran regalo», quizás comparable a la «fortuna» que tuvo al empezar a actuar en «Hospital Central» sólo dos meses después de terminar «Periodistas».
Jordi Rebellón , su pareja en la exitosa serie como Roberto Vilches, no tuvo tanta suerte al fin de la ficción más larga de la televisión en España. Superados sus dos años de parón, combina el rodaje de «Amar es para siempre» (la segunda temporada de la exitosa «Amar en tiempos revueltos» ) con su papel como astuto secretario de prensa del presidente. Él será el encargado de que la periodista dude hasta de sí misma durante sus pesquisas.
«Claro que cuesta reubicarse», dice su compañera. «La profesión de actor es muy inestable, muy injusta. No siempre trabajan los mejores. Pero es parte de esto. Uno tiene que saber que cuando todo brilla no es real, que somos trabajadores de historias ». Porque, como recuerda Rebellón, «el teatro vive en crisis desde antes de la guerra». ¿Y por qué? Porque «la única manera de verlo es yendo, no tiene top manta».
Amigos desde hace años, los tres actores se proponen mostrar en «Desclasificados» las contradicciones humanas a través de los políticos, que, según Climent «por desgracia no son cercanos, pero sí seres humanos, con sus aciertos y sus defectos».
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