Polémica ante la decisión de Putin de transferir a la Iglesia Ortodoxa la obra artística más importante de la antigüedad rusa

El Patriarca Kirill ha puntualizado que no fue él quien reclamó el icono y que la decisión ha correspondido en exclusiva y de forma personal a Putin. Los restauradores advierten que la pintura requiere unas condiciones determinadas de conservación y su exposición sin los debidos cuidados puede conducir a un deterioro irreversible. En la web de la Iglesia Ortodoxa señalan que la decisión del presidente fue la respuesta a «numerosas solicitudes de creyentes».

Sin embargo, el historiador medievalista y traductor, Oleg Voskoboynikov, cree que, sobre el fondo de la guerra en Ucrania, la entrega del icono a la Iglesia Ortodoxa «es una operación de imagen que trata de escenificar unidad espiritual de la nación rusa ante las adversidades«. Kirill y la cúpula eclesiástica se han mostrado favorables repetidamente a la llamada Intervención Militar Especial en Ucrania (SVO en sus siglas en ruso), pese a que en el país vecino también predomina la fe ortodoxa.

La oposición rusa cree que el «regalo» de 'La Trinidad' es la forma con la que el Kremlin, en donde se confía en la «fuerza» del icono, quiere agradecer a Kirill su «lealtad». El pasado mes de abril, coincidiendo con la Pascua ortodoxa, Putin visitó a los jefes militares rusos cerca del frente de Jersón (Ucrania) y les regaló también iconos.

En julio del año pasado, pese a las advertencias de los especialistas en arte, 'La Trinidad' fue enviada durante tres días al Monasterio Lavra de la Santísima Trinidad de Serguíyev Posad. Aquel evento se programó para coincidir con el 600 aniversario del hallazgo de las reliquias de San Sergio de Radonezh. Después de aquello y tras regresar a la Galería Tretiakov, los restauradores del museo anunciaron haber hallado «61 modificaciones significativas en el icono«.

En declaraciones a la BBC, Lev Lifshits, doctor en historia y jefe del departamento de arte antiguo ruso en el Instituto Estatal de Estudios de Arte, señaló que, el pasado 15 de mayo, poco antes de la aparición del decreto de Putin, la Galería Tretiakov reunió a su consejo de restauradores, y «se confirmó una vez más que la reliquia no debe ser trasladada ni tocada«. »Su estado después del viaje a Serguíyev Posad ha empeorado y es mejor no moverlo (…) quienes promueven su traslado persiguen cualquier tipo de interés salvo la preservación de la obra«, subrayó.

Desde 1575, la 'Trinidad' se mantuvo en el Monasterio Lavra de Serguíyev Posad y, en 1929, el Gobierno soviético lo transfirió a la Galería Tretiakov. Después de la desintegración de la URSS, la Iglesia Ortodoxa solicitó repetidamente la devolución del icono. Se desconoce a ciencia cierta la autoría de la pieza y la fecha exacta de su realización. Muchos historiadores atribuyen el trabajo a Andréi Rubliov, pero los hay que no están de acuerdo. Las fechas estimadas de la aparición del icono se sitúan entre 1408 y 1412 e incluso en torno a 1425.

Por primera vez, la imagen de la Trinidad en el arte ruso antiguo se asocia con el nombre de Andréi Rubliov en 1551 sin que nadie pudiera asegurar con certeza que se refería en concreto a 'La Trinidad' que ha llegado hasta nuestros días y que se considera la cima del arte ruso antiguo. Está catalogada como la obra más famosa y significativa para la cultura espiritual de Rusia.